Monday, December 29, 2008
ORDENACION PRESBITERAL EN LA CIUDAD DE GARIN
El Domingo 28 de Diciembre a las 10,00 hs. en la Parroquia Jesús Misericordioso de Garín, el Obispo de San Nicolás de los Arroyos, Mons. Héctor Cardelli confirió el Orden del Presbiterado a tres Hermanos Discípulos de Jesús de San Juan Bautista. Se trata de los Hermanos Juan Cruz, Salatiel e Isaías miembros de dicho Instituto, el cual tiene a cargo dicha Parroquia de Santa Teresa de Jesús, en la ciudad de Garín (partido de Escobar).
Estos Hermanos Discípulos recibieron su formación en Salta y México y completaron su formación en la Unisersidad Católica Argentina. Ejercieron su ministerio diaconal en las diócesis de 9 de julio y San Nicolas.
Los nuevos sacerdotes celebrarán sus primeras misas en sus ciudades de origen. El P. Isaías en la Parroquia de Nuestra Señora del Rosario, en la Diócesis de Concepción de Tucumán, el 30 de diciembre a las 20,00 hs. El P. Juan Cruz en la Parroquia San José de Metán, Arquidiócesis de Salta, el 3 de enero próximo a las 19,30 hs. Y el P. Salatiel en el Templo de San Francisco de Asís, en la ciudad de Celaya, Guanajuato, México; el 10 de enero de 2009 a las 13,00.
La santa misa de ordenación sacerdotal dio comienzo a las 9:00hs. La parroquia, repleta de fieles y familiares de los hermanos que se ordenaban, congregó alrededor de 600 personas que se hicieron presentes para este acontecimiento especial de fe y gozo en nuestro Señor.
El Servidor general del Instituto, P. Agustín Rozas, mencionó, entre otros conceptos, que: "El discípulo de Jesús sacerdote, expresa y realiza el amor de Dios a los hombres y solo desde el amor se comprende su obediencia y su Cruz, su silencio y castidad".
Se dió lectura también del mensaje enviado por nuestro Obispo, Mons. Oscar Sarlinga, en la que expresaba su alegría y gozo por los nuevos sacerdotes.
El servidor Gral. P. Rozas, agradeció a Monseñor Cardelli su presencia, así como su generosidad para acompañar a los Discípulos de Jesús en su vida apostólica, al tiempo que pedía por todos los Obispos, y en especial por el diocesano, S.E. Mons. Sarlinga.
Al término se compartió un almuerzo con los fieles y los nuevos sacerdotes.
Tuesday, December 23, 2008
INAUGURACION NUEVA CASA PARROQUIAL EN MANZANARES
Visita del Sr. Obispo, bendición de la pila bautismal y de la nueva sede, en el templo, e inauguración y bendición de la nueva casa parroquial.
El domingo 21 del corriente tocó el momento esperado de la inauguración de la nueva y funcional Casa Parroquial de la parroquia de Manzanares (en la zona de Manzanares-Fátima, partido de Pilar).
La Casa Parroquial, cuya construcción soluciona el problema de carencia de vivienda en el lugar del cura párroco, fue costeada con fondos aportados por la comunidad y un subsidio provincial. Al mismo tiempo, las instalaciones ya existentes serán enteramente utilizadas para usos pastorales, oficinas, salones de catequesis y lugar de encuentro de la comunidad. La obra forma parte de un proyecto más amplio, cuyas maquetas fueron presentadas a la comunidad presente al final de la misa.
El orden de las celebraciones debió ser alterado por la intensa lluvia, pese a lo cual hubo una gran concurrencia de fieles, y se contó con la presencia del Intendente municipal.
La eucaristía, presidida por el Obispo y concelebrada por Mons. Santiago Herrera, el Pbro. Hugo Acuña, cura párroco y los Padres Servitas, tuvo como intención la acción de por los beneficios recibidos del Señor, en este Año Paulino Jubilar de 2008.
La ceremonia comenzó con el acto de donación formal de la sede (donación del Sr. Obispo) y la bendición de la Pila Bautismal. La misa de campana que estaba prevista tuvo que ser celebrada en el templo por causa de la lluvia. Al término de la misa fueron explicados los proyectos de obras subsiguientes sobre una maqueta. Entre las futuras etapas de la obra que contemplan figuran, entre otras construcciones, la ampliación de la nave central del templo, la secretaría ampliada y la sede nueva de Cáritas.
La bendición de la Casa Parroquial, que incluyó la entronización de una imagen de la
Virgen María, fue seguida de la visita de la comunidad presente al nuevo edificio. La
Iglesia parroquial de San Luis Gonzaga está ubicada frente a la estación de
trenes, sobre la calle Teniente Primero Manzotti 149.
La jurisdicción parroquial fue la primera erigida por Mons. Sarlinga desde el inicio de su episcopado en la diócesis, el 22 de febrero de 2007, habiendo designado como primer cura párroco al Pbro. Hugo Acuña, ex cura de la Sagrada Familia, de Los Cardales. El área pastoral de la parroquia abarca una amplia zona desde la margen norte del Río Luján, hasta la Ruta 6, integrando las localidades de Fátima, Manzanares, Almirante Irízar, la zona del Parque Industrial y todos los barrios abiertos y cerrados, clubes de campo y rbanizaciones, asentadas en esta extensa región geográfica de nuestro distrito.
La sede de la parroquia es la capilla de Manzanares, hecha hace muchos años, con el esfuerzo de los fieles, en terrenos donados a la Iglesia por los primeros pobladores de estas tierras. Habiendo estado bajo el cuidado pastoral de los sacerdotes de la parroquia de Ntra. Sra. del Pilar, ya se habían iniciado las tareas de ampliación, dado el gran incremento de la grey católica que concurre a misa todas las semanas. Pero, con las nuevas funciones propias de su rango de parroquia, resultó necesario construir la casa parroquial, habilitar la secretaría y proyectar nuevos salones para Cáritas y otras actividades pastorales. Las obras se han ejecutado con el aporte y esfuerzo de muchos fieles y con la ayuda de diversas instituciones privadas y públicas.
Friday, December 19, 2008
PEREGRINACIÓN NAUTICA POR CAMPANA
El día 8 de diciembre, Solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Virgen María, se realizó la Peregrinación Náutica a “Ntr. Sra. De las Islas” Imagen que se venera en Centro de Formación Profesional del Obispado (Canal Alen y Carabera Grande)
La procesión se inició a las 9.00 hs. en el puerto de Campana con la bendición hecha por el P.Hugo Lovatto y encabezada por la nave Gurda Costa de la Prefectura Naval Argentina que portaba una Imagen de la Virgen de Lujan (Imagen que peregrina a la lo largo del año en toda la ciudad de Campana, visitando distintas comunidades e instituciones). Acompañaron varias embarcaciones (ocho) y tres catamaranes fueron levantando pasajeros por distintos sectores de la isla.
La Misa comenzó a las 11.00 hs. ( Previamente, mientras se esperaba la llegada de la procesión, se entregaron los diplomas de egresados del Centro de Formación).
La Misa fue precedida por el p.Hugo, asistieron el Diácono Lucas Martinez y un seminarista. Se celebraron 17 bautismos, 13 niños recibieron la primera Comunión y tres recibieron la Confirmación. Alrededor de 350 personas participaron de toda la celebración. Luego de la Misa se realizó la bendición de las embarcacines. Para finalizar se compartió el almuerzo. La Directora del Centro junto con docentes y alumnos fueron los encargados de preparar el lugar y servir de anfitriones.
Se vivó un gran clima de fe y alegría.
Se percibe que es una fiesta realmente significativa y esperada por los isleños, por muchos que acompañan desde la ciudad y para el Centro de formación que celebra además su fiesta Patronal.
Oración hecha por profesores y alumnos del Centro:
“Madre protectora de la Isla, estrella,
Gracias por estar con nosotros…
Patrona nuestra, ¡Dulce Señora!...
Madre Sagrada, no nos abandones,
Danos el pan de todo el año.
¡Aleluya! Reina del Cielo,
Acompáñanos siempre,
Ruega por nuestra salud.
Gracias por lo recibido
Y por tu protección
Esta es tu fiesta
¡Alabemos y cantemos!
Demos gracias a Dios
Demos gracias a Jesús, tu Hijo,
Y concédenos la Paz y la Esperanza.
Tuesday, December 09, 2008
CAMPAÑA SOLIDARIA DE LA PARROQUIA DE MANUEL ALBERTI PARA LA NAVIDAD
EN LUGAR DE GASTAR DINERO EN COHETES, AYUDAR A QUIENES MÁS LO NECESITAN
“Tuve hambre y me diste de comer”
Una vez más, quiero llegar a ustedes para invitarlos a unirnos en la “Campaña de Solidaridad” renunciando en esta Navidad a la “pirotecnia”, con la finalidad de que nuestros hermanos carenciados puedan acceder a una humilde “Mesa de Navidad”.
La propuesta es muy sencilla: mientras haya un solo hombre que tenga hambre, no gastemos en pirotecnia. El año pasado dimos 1.000 cenas de Navidad a un costo de $20 cada una. Este año, quisiéramos llegar a la misma cantidad de familias pero el costo aproximado será de $30.
La cena de Navidad consiste en:
1 pollo
1 pan dulce
1 sidra
1 paquete de galletitas
1 lata de duraznos en almíbar
No pierdan de vista y recuerden, especialmente, que con su estimable colaboración llevarán un momento de felicidad a los que sufren estas penurias, obsequiándoles una cena de Navidad.
F e l i z N a v i d a d
N.B. Si no pueden renunciar a la pirotecnia, inviertan en comida el equivalente a lo que gasten para tal fin.
“Tuve hambre y me diste de comer”
Una vez más, quiero llegar a ustedes para invitarlos a unirnos en la “Campaña de Solidaridad” renunciando en esta Navidad a la “pirotecnia”, con la finalidad de que nuestros hermanos carenciados puedan acceder a una humilde “Mesa de Navidad”.
La propuesta es muy sencilla: mientras haya un solo hombre que tenga hambre, no gastemos en pirotecnia. El año pasado dimos 1.000 cenas de Navidad a un costo de $20 cada una. Este año, quisiéramos llegar a la misma cantidad de familias pero el costo aproximado será de $30.
La cena de Navidad consiste en:
1 pollo
1 pan dulce
1 sidra
1 paquete de galletitas
1 lata de duraznos en almíbar
No pierdan de vista y recuerden, especialmente, que con su estimable colaboración llevarán un momento de felicidad a los que sufren estas penurias, obsequiándoles una cena de Navidad.
F e l i z N a v i d a d
N.B. Si no pueden renunciar a la pirotecnia, inviertan en comida el equivalente a lo que gasten para tal fin.
Friday, December 05, 2008
RETIRO ANUAL DE LA COMUNIDAD CARISMATICA CATOLICA "PADRE DE LOS POBRES"
El 21, 22 y23 de noviembre, se realizo en la casa de retiros Santa Ana de la Ciudad de Derqui (Pilar), el retiro anual de la Comunidad Carismática Católica Padre de los Pobres, en el que participaron fieles de la Arquidiócesis de Bs. As., de las Diócesis de San Isidro, de San Justo y de nuestra Diócesis, de las ciudades de Campana, Zarate y Capilla del Señor.
Con un total de 49 personas de edades diferentes que fueron desde los 14 años a los 86 años, se vivieron tres días de júbilo con Nuestro Señor, con un único motivo: redescubrirnos como creaturas de Dios, cuidadas y amadas por Él.. En unidad de espíritu, las alabanzas y la oración, reforzadas por las enseñanzas y predicas que estuvieron a cargo del padre Mario Sandoval y de Miguel Ángel (coordinador superior de la comunidad) y la animación del ministerio de música Ŝhema Israel de la misma comunidad, dieron como fruto paz interior y sanación, culminando con la misa dominical precedida por el Pbro. Mario Sandoval.
Monday, December 01, 2008
EL 30 DE NOVIEMBRE CUMPLE UN AÑO LA IIa. ENCÍCLICA DE SU SANTIDAD BENEDICTO XVI,
FUNDADOS EN LA ESPERANZA QUE NO DEFRAUDA, PREPARAMOS CON GRAN ALEGRÍA EN LA DIÓCESIS EL TIEMPO LITÚRGICO DEL ADVIENTO, EN EL ESPÍRITU DE LA MISIÓN QUE NOS PIDIÓ EL SANTO PADRE Y EL DOCUMENTO DE APARECIDA
El 30 de noviembre de 2007 Benedicto XVI publicaba su segunda encíclica. Su título, «Spe salvi», recogía una cita de san Pablo, Rm 8,24: “Hemos sido salvados en la esperanza”.
Es por ello que nuestro Obispo, Monseñor Oscar D. Sarlinga, presentó el día 22 dicha Encíclica en Campana, en un acto al que asistieron 400 personas, organizado por el Movimiento «Comunión y Liberación», como había sido el caso, a fines de 2007, con la primera encíclica del Papa, «Deus caritas est», en ambos casos en el Salón Cultural del Club «Ciudad de Campana».
Que la Esperanza nos colme en este tiempo de ADVIENTO que pronto iniciaremos, y siga encaminándonos en el AÑO PAULINO UNIVERSAL, con el estado de misión en la diócesis, y la dimensión misionera de toda la pastoral.
DOS NUEVAS PARROQUIAS
PARA LA DIÓCESIS DE ZÁRATE-CAMPANA
NUESTRA SEÑORA DE LUJÁN Y LOS SANTOS APÓSTOLES PEDRO Y PABLO
(erigida 23 de noviembre de 2008)
El día 23 del corriente, en la Solemnidad de Cristo Rey, fue erigida la parroquia de Nuestra Señora de Luján y los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, en la ciudad de Campana, como lo hemos señalado en el número precedente de nuestro infodiócesis, siendo su primer cura párroco el P. Joaquín Ocampo, D.J. La parroquia cuenta con templo (en proceso de reforma), casa parroquial amplia y espaciosa, salones pastorales y un amplio jardín con posibilidad de reunión de la comunidad al aire libre.
ERECCIÓN DE LA PARROQUIA DE «SAN MANUEL MÁRTIR» DE PILAR (30 de noviembre de 2008).
El día 30 de noviembre, el Sr. Obispo Mons. Oscar Sarlinga erige la parroquia de «San Manuel Mártir», en la que fue la Capilla del mismo nombre, sita en La Lonja (Partido de Pilar), en Ruta 8, Km 47, con territorio desmembrado de la parroquia matriz de Nuestra Señora del Pilar (Centro), luego de haber oído desde meses atrás al Consejo presbiteral, y haber consultado profundamente el tema con el cura párroco Pbro. José Ramón de la Villa, y con el Decano de Pilar, Pbro. Oscar Iglesias, así como luego de haber escuchado el insistente pedido de la comunidad de fieles, que muy numerosos acudieron tanto para la inauguración del gran salón parroquial como en las últimas fiestas patronales.
Al mismo tiempo, nombró cura párroco de la misma parroquia al Pbro. ALBINO CABRAL, el cual tomará posesión el domingo 30, a las 17 (el primer Domingo de adviento, coincidente con la Festividad del Apóstol San Andrés).
LA LONJA EN EL MAPA DE PILAR
La ubicación de la Lonja en el mapa de Pilar corresponde al número 3 de las subdivisiones de las localidades.
Localidades del Partido del Pilar
El Partido del Pilar abarca las siguientes localidades:
1. Del Viso
2. Fátima
3. La Lonja
4. Manuel Alberti
5. Manzanares
6. Pilar (cabecera)
7. Presidente Derqui
8. Villa Astolfi
9. Villa Rosa
10 Zelaya
INICIOS DE LA CAPILLA DE SAN MANUEL, MÁRTIR
La hermosa capilla, que desde el inicio se quiso dedicada a uno de los santos mártires persas del siglo IV (los tres hermanos, Manuel, Sabel e Ismael) fue construida en tiempos en que el actual partido de Pilar pertenecía a la diócesis de San Isidro, habiendo sido bendecida la piedra fundamental el día 26 de abril de 1958 por Mons. Antonio María Aguirre, Obispo de San Isidro, y siendo el padrino del acto el Sr. Comisionado municipal Dr. Alberto Finocchietto, y la Madrina la Sra. Noemí Angélica Otero Arbuco de Crambastiani.
La primera Misa fue celebrada en la capilla por el Vicario general del Obispado de San Isidro, Mons. Alberto Devoto (luego Obispo de Goya), el día 3 de abril de 1960.
Luego de la creación de la diócesis de Zárate-Campana (1976) la región pasó a formar parte de la jurisdicción de la parroquia de Nuestra Señora del Pilar, cuyo cura párroco es el Pbro. José Ramón de la Villa, en cuyo tiempo se hicieron notables reformas, y especialmente durante el encargo pastoral del actual vicario general, Mons. Edgardo Galuppo.
Luego de diversas situaciones, se hizo cargo de atender pastoralmente el lugar, el Pbro. Eduardo Carrozo, actualmente cura párroco de la Beata Teresa de Calcuta, en Zárate.
En el año 2006 Mons. Sarlinga nombró al P. Albino como vicario parroquial de Ntra. Sra. del Pilar, con especial encargo para la atención de la zona de La Lonja y ayuda a la llamada «vicaría» de Ntra. Sra. de Caacupé.
Como hemos dicho, la casa parroquial, que se encontraba por entonces en ciernes, fue concluida a mediados de 2008, y asimismo los espaciosos salones de reunión y de uso pastoral, con la ayuda de la comunidad de la zona.
HISTORIA DE SAN MANUEL MÁRTIR Y SUS HERMANOS
Digamos ahora una palabra acerca de los Santos Mártires
Manuel, Sabel e Ishmael
Estos tres hermanos eran persas, nacidos de padre pagano y madre cristiana. Educados con espíritu cristiano y luego bautizados, llegaron a ser oficiales de la corte del Rey Balanos, y luego enviados por él ante el emperador Juliano (el Apóstata, porque había renegado de la fe cristiana), a los fines de iniciar negociaciones que confirmaran la paz entre los Persas y el Imperio Greco-Romano. El emperador apostate, para el acto de recibirlos, había preparado una celebración pagana en honor a los ídolos, en la ciudad de Calcedonia, y acudió allí junto con su corte para ofrecer sacrificios a aquellos ídolos. Los delegados Persas se ausentaron de la celebración (hoy diríamos, por razón de conciencia, u objeción de conciencia, debido a su fe cristiana), pero el emperador, contra todo derecho, los convocó obligatoriamente y les ordenó perentoriamente que tomaran parte de las festividades en honor de los falsos dioses. Aduciendo su estatuto «diplomático» (porque eran delegados del Rey de Persia) los tres hermanos declararon en primer lugar que estaban allí para hacer tratativas de paz y no para otra cosa, y además que, siendo cristianos, consideraban indigno inclinarse ante los ídolos y ofrecerles sacrificios. El emperador Juliano, furioso, los arrojó a prisión, desde donde fueron sacados recién al otro día, para disputar sobre temas de la Fe, y para ser convencidos en abjurar, con lo que ellos no consintieron, lo que fue causa del inicio del martirio. Atados desnudos y azotados con varillas de hierro. Durante su tortura, oraban a Jesús como Salvador del mundo.
De nuevo obrando contra todo derecho, y ya contra toda sanidad de la mente, el emperador Juliano ordenó que fueran atravesados a la espada y luego prendidos fuego, en el año 362. Cuenta la tradición piadosa que hubo un terremoto en el momento de la ejecución, lo cual imposibilitó a los esbirros del emperador el quemar los cuerpos, por lo cual fueron enterrados luego por los cristianos.
Al enterarse el Rey de Persia (que no era cristiano) del inhumano tratamiento que el emperador les había prodigado a sus delegados por razones de religión, le declaró la guerra, en la que el mismo emperador Juliano fue muerto, luego de caer, abatido por la espada, de rodillas.
El 30 de noviembre de 2007 Benedicto XVI publicaba su segunda encíclica. Su título, «Spe salvi», recogía una cita de san Pablo, Rm 8,24: “Hemos sido salvados en la esperanza”.
Es por ello que nuestro Obispo, Monseñor Oscar D. Sarlinga, presentó el día 22 dicha Encíclica en Campana, en un acto al que asistieron 400 personas, organizado por el Movimiento «Comunión y Liberación», como había sido el caso, a fines de 2007, con la primera encíclica del Papa, «Deus caritas est», en ambos casos en el Salón Cultural del Club «Ciudad de Campana».
Que la Esperanza nos colme en este tiempo de ADVIENTO que pronto iniciaremos, y siga encaminándonos en el AÑO PAULINO UNIVERSAL, con el estado de misión en la diócesis, y la dimensión misionera de toda la pastoral.
DOS NUEVAS PARROQUIAS
PARA LA DIÓCESIS DE ZÁRATE-CAMPANA
NUESTRA SEÑORA DE LUJÁN Y LOS SANTOS APÓSTOLES PEDRO Y PABLO
(erigida 23 de noviembre de 2008)
El día 23 del corriente, en la Solemnidad de Cristo Rey, fue erigida la parroquia de Nuestra Señora de Luján y los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, en la ciudad de Campana, como lo hemos señalado en el número precedente de nuestro infodiócesis, siendo su primer cura párroco el P. Joaquín Ocampo, D.J. La parroquia cuenta con templo (en proceso de reforma), casa parroquial amplia y espaciosa, salones pastorales y un amplio jardín con posibilidad de reunión de la comunidad al aire libre.
ERECCIÓN DE LA PARROQUIA DE «SAN MANUEL MÁRTIR» DE PILAR (30 de noviembre de 2008).
El día 30 de noviembre, el Sr. Obispo Mons. Oscar Sarlinga erige la parroquia de «San Manuel Mártir», en la que fue la Capilla del mismo nombre, sita en La Lonja (Partido de Pilar), en Ruta 8, Km 47, con territorio desmembrado de la parroquia matriz de Nuestra Señora del Pilar (Centro), luego de haber oído desde meses atrás al Consejo presbiteral, y haber consultado profundamente el tema con el cura párroco Pbro. José Ramón de la Villa, y con el Decano de Pilar, Pbro. Oscar Iglesias, así como luego de haber escuchado el insistente pedido de la comunidad de fieles, que muy numerosos acudieron tanto para la inauguración del gran salón parroquial como en las últimas fiestas patronales.
Al mismo tiempo, nombró cura párroco de la misma parroquia al Pbro. ALBINO CABRAL, el cual tomará posesión el domingo 30, a las 17 (el primer Domingo de adviento, coincidente con la Festividad del Apóstol San Andrés).
LA LONJA EN EL MAPA DE PILAR
La ubicación de la Lonja en el mapa de Pilar corresponde al número 3 de las subdivisiones de las localidades.
Localidades del Partido del Pilar
El Partido del Pilar abarca las siguientes localidades:
1. Del Viso
2. Fátima
3. La Lonja
4. Manuel Alberti
5. Manzanares
6. Pilar (cabecera)
7. Presidente Derqui
8. Villa Astolfi
9. Villa Rosa
10 Zelaya
INICIOS DE LA CAPILLA DE SAN MANUEL, MÁRTIR
La hermosa capilla, que desde el inicio se quiso dedicada a uno de los santos mártires persas del siglo IV (los tres hermanos, Manuel, Sabel e Ismael) fue construida en tiempos en que el actual partido de Pilar pertenecía a la diócesis de San Isidro, habiendo sido bendecida la piedra fundamental el día 26 de abril de 1958 por Mons. Antonio María Aguirre, Obispo de San Isidro, y siendo el padrino del acto el Sr. Comisionado municipal Dr. Alberto Finocchietto, y la Madrina la Sra. Noemí Angélica Otero Arbuco de Crambastiani.
La primera Misa fue celebrada en la capilla por el Vicario general del Obispado de San Isidro, Mons. Alberto Devoto (luego Obispo de Goya), el día 3 de abril de 1960.
Luego de la creación de la diócesis de Zárate-Campana (1976) la región pasó a formar parte de la jurisdicción de la parroquia de Nuestra Señora del Pilar, cuyo cura párroco es el Pbro. José Ramón de la Villa, en cuyo tiempo se hicieron notables reformas, y especialmente durante el encargo pastoral del actual vicario general, Mons. Edgardo Galuppo.
Luego de diversas situaciones, se hizo cargo de atender pastoralmente el lugar, el Pbro. Eduardo Carrozo, actualmente cura párroco de la Beata Teresa de Calcuta, en Zárate.
En el año 2006 Mons. Sarlinga nombró al P. Albino como vicario parroquial de Ntra. Sra. del Pilar, con especial encargo para la atención de la zona de La Lonja y ayuda a la llamada «vicaría» de Ntra. Sra. de Caacupé.
Como hemos dicho, la casa parroquial, que se encontraba por entonces en ciernes, fue concluida a mediados de 2008, y asimismo los espaciosos salones de reunión y de uso pastoral, con la ayuda de la comunidad de la zona.
HISTORIA DE SAN MANUEL MÁRTIR Y SUS HERMANOS
Digamos ahora una palabra acerca de los Santos Mártires
Manuel, Sabel e Ishmael
Estos tres hermanos eran persas, nacidos de padre pagano y madre cristiana. Educados con espíritu cristiano y luego bautizados, llegaron a ser oficiales de la corte del Rey Balanos, y luego enviados por él ante el emperador Juliano (el Apóstata, porque había renegado de la fe cristiana), a los fines de iniciar negociaciones que confirmaran la paz entre los Persas y el Imperio Greco-Romano. El emperador apostate, para el acto de recibirlos, había preparado una celebración pagana en honor a los ídolos, en la ciudad de Calcedonia, y acudió allí junto con su corte para ofrecer sacrificios a aquellos ídolos. Los delegados Persas se ausentaron de la celebración (hoy diríamos, por razón de conciencia, u objeción de conciencia, debido a su fe cristiana), pero el emperador, contra todo derecho, los convocó obligatoriamente y les ordenó perentoriamente que tomaran parte de las festividades en honor de los falsos dioses. Aduciendo su estatuto «diplomático» (porque eran delegados del Rey de Persia) los tres hermanos declararon en primer lugar que estaban allí para hacer tratativas de paz y no para otra cosa, y además que, siendo cristianos, consideraban indigno inclinarse ante los ídolos y ofrecerles sacrificios. El emperador Juliano, furioso, los arrojó a prisión, desde donde fueron sacados recién al otro día, para disputar sobre temas de la Fe, y para ser convencidos en abjurar, con lo que ellos no consintieron, lo que fue causa del inicio del martirio. Atados desnudos y azotados con varillas de hierro. Durante su tortura, oraban a Jesús como Salvador del mundo.
De nuevo obrando contra todo derecho, y ya contra toda sanidad de la mente, el emperador Juliano ordenó que fueran atravesados a la espada y luego prendidos fuego, en el año 362. Cuenta la tradición piadosa que hubo un terremoto en el momento de la ejecución, lo cual imposibilitó a los esbirros del emperador el quemar los cuerpos, por lo cual fueron enterrados luego por los cristianos.
Al enterarse el Rey de Persia (que no era cristiano) del inhumano tratamiento que el emperador les había prodigado a sus delegados por razones de religión, le declaró la guerra, en la que el mismo emperador Juliano fue muerto, luego de caer, abatido por la espada, de rodillas.
Monday, November 24, 2008
MULTITUDINARIA CELEBRACIÓN DE CONFIRMACIONES EN LOS CARDALES
El día viernes 21 se noviembre a partir de las 20 la diócesis vivió un renovado Pentecostés en la celebración de las confirmaciones de la parroquia de la Sagrada Familia, de Los Cardales (jurisdicción parroquial enclavada entre los partidos de Campana, Exaltación de la Cruz y una pequeña parte de Pilar), durante la cual recibieron el Don del Espíritu Santo 163 jóvenes y adultos. De entre ellos, 71 pertenecen al Colegio parroquial y los 92 confirmados restantes, entre jóvenes y adultos, a distintos sectores de la Parroquia, tanto del centro (el ejido urbano tiene unos 13.000 habitantes) así como de las Comunidades de Etchegoyen, Escuela Lemme, Barrio Sakura y Río Luján.
Ubicado un gran palco en un amplio predio del Municipio, cálculos de la policía local arrojaron entre 1400 y 1500 personas los presentes, esto es, más del 10% de la población del ejido, en una parroquia que en total posee unos 20.000 habitantes, contando las nuevas urbanizaciones en el sector del partido de Campana.
El lema de la celebración fue "SERÁN MIS TESTIGOS", que el Obispo tuvo muy presente en su homilía, la cual centró en la fuerza del Espíritu Santo, y lo que significa frente a las debilidades humanas, ubicando entre estas últimas el desamor, el desafecto, el desánimo y la falta de un proyecto de vida. Frente a esto, así como a ciertos flagelos, dijo Monseñor, más que quejarnos de la oscuridad o las tinieblas que tantas veces nos rodean, estamos llamados a ser testigos de la esperanza que no defrauda, y a encender una luz, con el tesoro de la Fe, y una Fe que se haga vida, y que ilumine a los demás.
Dada la cantidad de jóvenes y adultos a confirmar, el Sr. Obispo asoció al cura párroco, Pbro. Claudio Caruso a la crismación, y luego de agradecerle, así como al diácono permanente Ricardo Reggio, a los catequistas y a todos quienes habían colaborado con la celebración, al término de la ceremonia hubo varias fotos de grupos y nuestro Obispo permaneció un tiempo saludando a los fieles, junto con el cura párroco.
Ubicado un gran palco en un amplio predio del Municipio, cálculos de la policía local arrojaron entre 1400 y 1500 personas los presentes, esto es, más del 10% de la población del ejido, en una parroquia que en total posee unos 20.000 habitantes, contando las nuevas urbanizaciones en el sector del partido de Campana.
El lema de la celebración fue "SERÁN MIS TESTIGOS", que el Obispo tuvo muy presente en su homilía, la cual centró en la fuerza del Espíritu Santo, y lo que significa frente a las debilidades humanas, ubicando entre estas últimas el desamor, el desafecto, el desánimo y la falta de un proyecto de vida. Frente a esto, así como a ciertos flagelos, dijo Monseñor, más que quejarnos de la oscuridad o las tinieblas que tantas veces nos rodean, estamos llamados a ser testigos de la esperanza que no defrauda, y a encender una luz, con el tesoro de la Fe, y una Fe que se haga vida, y que ilumine a los demás.
Dada la cantidad de jóvenes y adultos a confirmar, el Sr. Obispo asoció al cura párroco, Pbro. Claudio Caruso a la crismación, y luego de agradecerle, así como al diácono permanente Ricardo Reggio, a los catequistas y a todos quienes habían colaborado con la celebración, al término de la ceremonia hubo varias fotos de grupos y nuestro Obispo permaneció un tiempo saludando a los fieles, junto con el cura párroco.
Wednesday, November 19, 2008
PRESENTACIÓN DE LA ENCÍCLICA DEL PAPA BENEDICTO XVI «SPE SALVI» POR MONS. OSCAR SARLINGA
El próximo Sábado 22 de Noviembre a las 19:30 hs. en el Salón Cultural del Club Ciudad de Campana (Guemes y Chiclana de esta ciudad), el Sr. Obispo de la Diócesis de Zárate - Campana S.E.R. MONSEÑOR OSCAR SARLINGA llevará a cabo la presentación pública de la Encíclica de Su Santidad el Papa Benedicto XVI "SPE SALVI", la segunda que escribiera el Santo Padre.
El gesto, de excepcional relevancia, está organizado y promovido por el MOVIMIENTO COMUNION Y LIBERACION y cuenta con el auspicio de la Municipalidad de Campana.
Tal como sucediera el pasado año 2007 con "Deus Caritas Est" -la primera Encíclica del papado de Benedicto XVI-, será esta la segunda ocasión en que el Sr. Obispo diocesano aborde en nuestra ciudad y bajo la forma de un acto público, la presentación de una Carta Encíclica y con ella la difusión de la voz del Santo Padre.
En tal sentido los organizadores del encuentro nos han destacado que si bien el Papa Benedicto XVI y nuestro Obispo diocesano son pastores de la Iglesia Católica, la propuesta del evento del 22 de noviembre se dirige a la totalidad de la comunidad de Campana, por una sencilla razón: el Papa le habla a cada hombre y mujer en esta tierra, partiendo de la certeza de saber que los deseos de felicidad y plenitud son los mismos en el corazón de cada persona y cada uno espera, ansiosamente y aún sin saberlo, su cumplimiento.
La Carta Encíclica "Spe Salvi" está dedicada a la Esperanza, siguiendo la expresión de San Pablo en la Carta a los Romanos (8,24) cuando ha dicho "…en esperanza fuimos salvados…". Refiere Benedicto XVI que "Según la fe cristiana, la "redención", la salvación, no es simplemente un dato de hecho. Se nos ofrece la salvación en el sentido de que se nos ha dado la esperanza, una esperanza fiable, gracias a la cual podemos afrontar nuestro presente: el presente, aunque sea un presente fatigoso, se puede vivir y aceptar si lleva hacia una meta, si podemos estar seguros de esta meta y si esta meta es tan grande que justifique el esfuerzo del camino. Ahora bien, se nos plantea inmediatamente la siguiente pregunta: pero ¿de que género ha de ser esta esperanza para poder justificar la afirmación de que a partir de ella, y simplemente porque hay esperanza, somos redimidos por ella? Y, ¿de qué tipo de certeza se trata? (SPE SALVI, introd.).
El encuentro es de acceso libre y gratuito y a través de este medio se hace extensiva la invitación a toda la comunidad.
El gesto, de excepcional relevancia, está organizado y promovido por el MOVIMIENTO COMUNION Y LIBERACION y cuenta con el auspicio de la Municipalidad de Campana.
Tal como sucediera el pasado año 2007 con "Deus Caritas Est" -la primera Encíclica del papado de Benedicto XVI-, será esta la segunda ocasión en que el Sr. Obispo diocesano aborde en nuestra ciudad y bajo la forma de un acto público, la presentación de una Carta Encíclica y con ella la difusión de la voz del Santo Padre.
En tal sentido los organizadores del encuentro nos han destacado que si bien el Papa Benedicto XVI y nuestro Obispo diocesano son pastores de la Iglesia Católica, la propuesta del evento del 22 de noviembre se dirige a la totalidad de la comunidad de Campana, por una sencilla razón: el Papa le habla a cada hombre y mujer en esta tierra, partiendo de la certeza de saber que los deseos de felicidad y plenitud son los mismos en el corazón de cada persona y cada uno espera, ansiosamente y aún sin saberlo, su cumplimiento.
La Carta Encíclica "Spe Salvi" está dedicada a la Esperanza, siguiendo la expresión de San Pablo en la Carta a los Romanos (8,24) cuando ha dicho "…en esperanza fuimos salvados…". Refiere Benedicto XVI que "Según la fe cristiana, la "redención", la salvación, no es simplemente un dato de hecho. Se nos ofrece la salvación en el sentido de que se nos ha dado la esperanza, una esperanza fiable, gracias a la cual podemos afrontar nuestro presente: el presente, aunque sea un presente fatigoso, se puede vivir y aceptar si lleva hacia una meta, si podemos estar seguros de esta meta y si esta meta es tan grande que justifique el esfuerzo del camino. Ahora bien, se nos plantea inmediatamente la siguiente pregunta: pero ¿de que género ha de ser esta esperanza para poder justificar la afirmación de que a partir de ella, y simplemente porque hay esperanza, somos redimidos por ella? Y, ¿de qué tipo de certeza se trata? (SPE SALVI, introd.).
El encuentro es de acceso libre y gratuito y a través de este medio se hace extensiva la invitación a toda la comunidad.
Tuesday, November 11, 2008
PRIMER ENCUENTRO INTERRELIGIOSO ORGANIZADO POR ROTARY CLUB PILAR
Mons. Oscar Sarlinga participó junto con el Rabino Daniel Goldman y el Prof. Omar Abboud del Ier. Encuentro interreligioso organizado por el Rotary Club de Pilar a beneficio del Hospital de Pediatría «Federico Falcón»
Tuvo lugar el jueves 6 de noviembre el "Primer Encuentro para el diálogo Interreligioso Pilar 2008: Religión, Paz Social y Sociedad Civil", auspiciado por el Rotary Club de Pilar, a partir de las 18.30 en el «Sheraton Pilar Hotel & Convention Center» (Km 49,500 de la Ruta Panamericana, acceso Pilar). A las 18.30 comenzó la rueda de prensa en la que la totalidad de los medios regionales y algunos nacionales se interesaron por el evento, y formularon numerosas preguntas tanto a Mons. Oscar Sarlinga como al Rabino Goldman y al Prof. Abboud.
Los medios expresaron en sus lineas al respecto: "La conferencia está a cargo de importantísimos referentes de las tres principales religiones del país, tales como Monseñor Oscar Sarlinga (católica), el Rabino Daniel Goldman (judía) y el Profesor Omar Abboud (islámica). El moderador será el periodista Oscar Gómez Castañón. La finalidad de la conferencia, además de tocar puntos de relevancia en la actualidad, es la de recaudar fondos para el Hospital de Pediatría Federico Falcón, de Pilar".
Asimismo, el presidente del Rotary Club, Dr. Pablo Atchabahian, expresó: "Promover este encuentro es, para el Rotary Club de Pilar, motivo de inmensa satisfacción y alegría, por ser la culminación de muchos esfuerzos de organización y porque las personalidades convocadas no son sólo expertos en el tema que van a desarrollar, sino auténticos promotores y practicantes de las relaciones cordiales entre credos diferentes". Además, agregó que "(…) tenemos la certeza que el diálogo entre estos tres hombres de Fe superará las barreras que hubieran podido surgir, y pese a las diferencias confesionales, el encuentro ayudará a buscar puntos comunes para alcanzar búsqueda de la verdad y paz social a toda la sociedad (…) y que "(…) seguramente contribuirá a favorecer la convivencia de nuestra comunidad pilarense".
"El abrazo de las religiones requiere la singularidad de cada religión, la riqueza de su bagaje histórico y cultural. Cada cultura ha elaborado sus propios símbolos y formulaciones del Misterio, y tal vez la primera conversión debería ser la de respetar y admirar la sabiduría y belleza de esos otros accesos. Sólo desde esta perspectiva, el diálogo interreligioso cobra toda su relevancia", anticipó el Rabino Daniel Goldman Por su parte, Omar Ahmed Abboud aseguró que "hablamos de una época de comunicaciones: un tiempo donde el milagro tecnológico parece acortar distancias como nunca antes en la historia de la humanidad. Sin embargo lo vertiginoso y amplio de la comunicación, no significa necesariamente más entendimiento entre los hombres. De hecho la proliferación de conflictos, la pobreza, la exclusión, la violencia y otras tantas realidades, son síntomas evidentes de una falta de mutua comprensión humana. Sin duda una de las herramientas para arribar a procesos de resolución satisfactorios no es otra que el diálogo. El diálogo lejos de ser una cuestión declamativa o formal es el instrumento humano de acuerdo por excelencia. En este sentido, el diálogo interreligioso es con seguridad uno de los signos de estos tiempos".
Mons. Oscar Sarlinga, Obispo de la diócesis a la que pertenece el partido de Pilar, adelantó el siguiente testimonio sobre la libertad y el diálogo interreligiosos en aras de un mundo mejor: La libertad religiosa y el diálogo interreligioso, un gran signo de los tiempos para ser constructores de paz, en un mundo mejor "El diálogo interreligioso, auténtico, fraterno, constructivo, es una urgencia para nuestro tiempo. Estamos aquí de nuevo ante un gran encuentro fraterno, y digo «gran» porque grande es el don de la concordia y de la paz. La búsqueda de sentido, de la concordia, el tender puentes hacia una pacífica convivencia y hacia la construcción de una civilización fundada en el Amor es un anhelo real, puesto que también reales son la verdad y la justicia, no menos que el mismo amor. Más que «ideales» (aunque también lo son) se trata sobre todo de realidades «de enorme densidad»(1).
En efecto, los seres humanos buscamos respuestas a algunos de los interrogantes existenciales fundamentales: ¿Cuál es el origen y el destino de los seres humanos? ¿Qué es el bien y el mal? ¿Qué aguarda a los seres humanos al final de su existencia terrena?. Desde esta perspectiva, todos tenemos en conciencia que procurar la búsqueda de la verdad, la cual es fuente de felicidad y de paz(2).
Es en esta huella donde vemos que un signo de los tiempos de hoy, consiste en favorecer un clima cultural que subraye la importancia de la dimensión espiritual del ser humano, para lo cual ayuda grandemente el diálogo interreligioso. Se trata, ante todo, de un auténtico diá-logo (nunca «monó-logo intercambiado») entre los fieles de religiones diversas, en apertura asimismo al diálogo con quien, quizá, no cree, pero comparte valores humanos que construyen la sociedad, lo comunitario. Diálogo que, más que en lo estrictamente individual, se da en la relación «con el otro», porque la naturaleza misma de nuestro ser nos muestra esta dinámica, que nacemos en una comunidad, somos educados en una comunidad, buena parte de nuestra vida la transcurrimos con otros. Es en esta dinámica donde se inserta la experiencia religiosa, la cual es interior, sí, con una dimensión pública y social.
Conexo a este aspecto está el gran tema de la libertad religiosa, derecho primario del hombre, llamado por Juan Pablo II, «punto cardinal de los derechos humanos». Tenemos que valorarlo mucho, y cuidarlo. El principio de la libertad religiosa, sirve para valorar una experiencia de fe, pero al mismo tiempo también para verificar la capacidad del ordenamiento jurídico de un país. Ese principio conlleva, es verdad, la libertad de cultos y la expresión de éstos, y contiene primero la consideración positiva de la experiencia religiosa del pueblo. Su base se halla en la dignidad de la persona humana y en la rectitud de la conciencia(3).
De aquí que sea tan fundamental, tan urgente, diría, el conocernos más y el aceptarnos en nuestros valores comunes, con corazón abierto y las manos tendidas hacia una mancomunidad de valores trascendentes. En la educación de la juventud, el diálogo interreligioso se revela también prometedor, porque los jóvenes son por excelencia aquellos destinados a forjar el mundo del mañana. El Papa Juan Pablo II dijo un día a los jóvenes musulmanes reunidos en el estadio de Casablanca, en Marruecos: «Los jóvenes pueden construir un futuro mejor si ponen sobre todo su fe en Dios y se empeñan en construir este mundo nuevo según el designio de Dios, con sabiduría y confianza»(4).
El mundo sería mejor si viéramos también nosotros la importancia de ese empeño y lo asumiéramos, asimismo, con sabiduría y confianza, poniéndonos en el corazón la meta de trazar caminos de colaboración interreligiosa en las distintas áreas del desarrollo humano integral. Me refiero a puentes de amistad, para el bien auténtico de cada persona y de la sociedad en su conjunto, con esperanza, la que no defrauda(5). Ojalá (que en su origen significa «quiera Dios») nos dispongamos a apoyar cada día más este estupendo proyecto".
GRAN CONCURRENCIA
En este encuentro interreligioso se dio una concurrencia de 400 personas, entre las que se hicieron presentes funcionarios del gobierno provincial y municipal, así como cuerpo diplomático de diversas embajadas.
Con respecto a los disertantes, el Rabino Daniel Goldman se ordenó como Rabino en el Seminario Rabínico Latinoamericano, Argentina en 1985. Desde hace 18 años se desempeña como líder espiritual de la Comunidad Bet El de Argentina. D. Goldman estudió Derecho en la Universidad de Buenos Aires, y Filosofía en la Universidad Hebrea de Jerusalem, Israel y el Hebrew Unión College, Cincinnati, USA. Es miembro del Consejo Consultivo del INADI (Instituto Nacional contra la Discriminación)-Argentna. También es fundador del Instituto del Diálogo Religioso con sede en Argentina que alberga referentes religiosos cristianos y del Islam. Por su preocupación social y por su tarea en el área de los derechos humanos ha sido honrado con numerosas distinciones tanto en el país
Por otro lado, Monseñor Dr. Oscar D. Sarlinga, Obispo diocesano de Zárate-Campana, fue nombrado en tal cargo por el Papa Benedicto XVI el 3 de febrero de 2006 (Juan Pablo II lo había elegido Obispo el 12 de abril de 2003, asignándole la sede titular de Uzali y el encargo de auxiliar de Mercedes-Luján. Es Licenciado en Teología con orientación moral por la Universidad de Fribourg (Suiza); Licenciado en Derecho Canónico por la Pontificia Universidad de Salamanca (España) y Doctor en Teología Dogmática por la Pontificia Università della Santa Croce, de Roma.
En tanto, el profesor Omar Abboud, es una figura muy comprometida con el diálogo interreligioso de nuestro país. O. Abboud es Secretario General del Centro Islámico de la República Argentina y co-fundador del "Instituto del Diálogo Interreligioso" cuya actividad en el campo de la comprensión y la cooperación entre personas de distintos credos, etnias y culturas los hizo acreedores del premio Konex 2008 para dirigentes comunitarios.
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1. Cf. BENEDICTO XVI, Enc. Deus Caritas est.
2. Cf. CONC. ECUM. VAT. II, Decl. Nostrae aetate, n. 1; Decl. Dignitatis humanae, n.2.
3. Cf CONC. ECUM. VAT. II, Decl. Dignitatis humanae, n. 3
4. JUAN PABLO II, Discurso a los jóvenes musulmanes en el estadio de Casablanca (Marruecos), en Insegnamenti, VIII/2, 1985, p. 500.
5. Cf Benedicto XVI, Discurso con oportunidad del encuentro con los Delegados de las Iglesias y las Comunidades eclesiales y con los representantes de las varias Tradiciones religiosas, en: L'Osservatore Romano, 25 abril 2005, p. 4.
Tuvo lugar el jueves 6 de noviembre el "Primer Encuentro para el diálogo Interreligioso Pilar 2008: Religión, Paz Social y Sociedad Civil", auspiciado por el Rotary Club de Pilar, a partir de las 18.30 en el «Sheraton Pilar Hotel & Convention Center» (Km 49,500 de la Ruta Panamericana, acceso Pilar). A las 18.30 comenzó la rueda de prensa en la que la totalidad de los medios regionales y algunos nacionales se interesaron por el evento, y formularon numerosas preguntas tanto a Mons. Oscar Sarlinga como al Rabino Goldman y al Prof. Abboud.
Los medios expresaron en sus lineas al respecto: "La conferencia está a cargo de importantísimos referentes de las tres principales religiones del país, tales como Monseñor Oscar Sarlinga (católica), el Rabino Daniel Goldman (judía) y el Profesor Omar Abboud (islámica). El moderador será el periodista Oscar Gómez Castañón. La finalidad de la conferencia, además de tocar puntos de relevancia en la actualidad, es la de recaudar fondos para el Hospital de Pediatría Federico Falcón, de Pilar".
Asimismo, el presidente del Rotary Club, Dr. Pablo Atchabahian, expresó: "Promover este encuentro es, para el Rotary Club de Pilar, motivo de inmensa satisfacción y alegría, por ser la culminación de muchos esfuerzos de organización y porque las personalidades convocadas no son sólo expertos en el tema que van a desarrollar, sino auténticos promotores y practicantes de las relaciones cordiales entre credos diferentes". Además, agregó que "(…) tenemos la certeza que el diálogo entre estos tres hombres de Fe superará las barreras que hubieran podido surgir, y pese a las diferencias confesionales, el encuentro ayudará a buscar puntos comunes para alcanzar búsqueda de la verdad y paz social a toda la sociedad (…) y que "(…) seguramente contribuirá a favorecer la convivencia de nuestra comunidad pilarense".
"El abrazo de las religiones requiere la singularidad de cada religión, la riqueza de su bagaje histórico y cultural. Cada cultura ha elaborado sus propios símbolos y formulaciones del Misterio, y tal vez la primera conversión debería ser la de respetar y admirar la sabiduría y belleza de esos otros accesos. Sólo desde esta perspectiva, el diálogo interreligioso cobra toda su relevancia", anticipó el Rabino Daniel Goldman Por su parte, Omar Ahmed Abboud aseguró que "hablamos de una época de comunicaciones: un tiempo donde el milagro tecnológico parece acortar distancias como nunca antes en la historia de la humanidad. Sin embargo lo vertiginoso y amplio de la comunicación, no significa necesariamente más entendimiento entre los hombres. De hecho la proliferación de conflictos, la pobreza, la exclusión, la violencia y otras tantas realidades, son síntomas evidentes de una falta de mutua comprensión humana. Sin duda una de las herramientas para arribar a procesos de resolución satisfactorios no es otra que el diálogo. El diálogo lejos de ser una cuestión declamativa o formal es el instrumento humano de acuerdo por excelencia. En este sentido, el diálogo interreligioso es con seguridad uno de los signos de estos tiempos".
Mons. Oscar Sarlinga, Obispo de la diócesis a la que pertenece el partido de Pilar, adelantó el siguiente testimonio sobre la libertad y el diálogo interreligiosos en aras de un mundo mejor: La libertad religiosa y el diálogo interreligioso, un gran signo de los tiempos para ser constructores de paz, en un mundo mejor "El diálogo interreligioso, auténtico, fraterno, constructivo, es una urgencia para nuestro tiempo. Estamos aquí de nuevo ante un gran encuentro fraterno, y digo «gran» porque grande es el don de la concordia y de la paz. La búsqueda de sentido, de la concordia, el tender puentes hacia una pacífica convivencia y hacia la construcción de una civilización fundada en el Amor es un anhelo real, puesto que también reales son la verdad y la justicia, no menos que el mismo amor. Más que «ideales» (aunque también lo son) se trata sobre todo de realidades «de enorme densidad»(1).
En efecto, los seres humanos buscamos respuestas a algunos de los interrogantes existenciales fundamentales: ¿Cuál es el origen y el destino de los seres humanos? ¿Qué es el bien y el mal? ¿Qué aguarda a los seres humanos al final de su existencia terrena?. Desde esta perspectiva, todos tenemos en conciencia que procurar la búsqueda de la verdad, la cual es fuente de felicidad y de paz(2).
Es en esta huella donde vemos que un signo de los tiempos de hoy, consiste en favorecer un clima cultural que subraye la importancia de la dimensión espiritual del ser humano, para lo cual ayuda grandemente el diálogo interreligioso. Se trata, ante todo, de un auténtico diá-logo (nunca «monó-logo intercambiado») entre los fieles de religiones diversas, en apertura asimismo al diálogo con quien, quizá, no cree, pero comparte valores humanos que construyen la sociedad, lo comunitario. Diálogo que, más que en lo estrictamente individual, se da en la relación «con el otro», porque la naturaleza misma de nuestro ser nos muestra esta dinámica, que nacemos en una comunidad, somos educados en una comunidad, buena parte de nuestra vida la transcurrimos con otros. Es en esta dinámica donde se inserta la experiencia religiosa, la cual es interior, sí, con una dimensión pública y social.
Conexo a este aspecto está el gran tema de la libertad religiosa, derecho primario del hombre, llamado por Juan Pablo II, «punto cardinal de los derechos humanos». Tenemos que valorarlo mucho, y cuidarlo. El principio de la libertad religiosa, sirve para valorar una experiencia de fe, pero al mismo tiempo también para verificar la capacidad del ordenamiento jurídico de un país. Ese principio conlleva, es verdad, la libertad de cultos y la expresión de éstos, y contiene primero la consideración positiva de la experiencia religiosa del pueblo. Su base se halla en la dignidad de la persona humana y en la rectitud de la conciencia(3).
De aquí que sea tan fundamental, tan urgente, diría, el conocernos más y el aceptarnos en nuestros valores comunes, con corazón abierto y las manos tendidas hacia una mancomunidad de valores trascendentes. En la educación de la juventud, el diálogo interreligioso se revela también prometedor, porque los jóvenes son por excelencia aquellos destinados a forjar el mundo del mañana. El Papa Juan Pablo II dijo un día a los jóvenes musulmanes reunidos en el estadio de Casablanca, en Marruecos: «Los jóvenes pueden construir un futuro mejor si ponen sobre todo su fe en Dios y se empeñan en construir este mundo nuevo según el designio de Dios, con sabiduría y confianza»(4).
El mundo sería mejor si viéramos también nosotros la importancia de ese empeño y lo asumiéramos, asimismo, con sabiduría y confianza, poniéndonos en el corazón la meta de trazar caminos de colaboración interreligiosa en las distintas áreas del desarrollo humano integral. Me refiero a puentes de amistad, para el bien auténtico de cada persona y de la sociedad en su conjunto, con esperanza, la que no defrauda(5). Ojalá (que en su origen significa «quiera Dios») nos dispongamos a apoyar cada día más este estupendo proyecto".
GRAN CONCURRENCIA
En este encuentro interreligioso se dio una concurrencia de 400 personas, entre las que se hicieron presentes funcionarios del gobierno provincial y municipal, así como cuerpo diplomático de diversas embajadas.
Con respecto a los disertantes, el Rabino Daniel Goldman se ordenó como Rabino en el Seminario Rabínico Latinoamericano, Argentina en 1985. Desde hace 18 años se desempeña como líder espiritual de la Comunidad Bet El de Argentina. D. Goldman estudió Derecho en la Universidad de Buenos Aires, y Filosofía en la Universidad Hebrea de Jerusalem, Israel y el Hebrew Unión College, Cincinnati, USA. Es miembro del Consejo Consultivo del INADI (Instituto Nacional contra la Discriminación)-Argentna. También es fundador del Instituto del Diálogo Religioso con sede en Argentina que alberga referentes religiosos cristianos y del Islam. Por su preocupación social y por su tarea en el área de los derechos humanos ha sido honrado con numerosas distinciones tanto en el país
Por otro lado, Monseñor Dr. Oscar D. Sarlinga, Obispo diocesano de Zárate-Campana, fue nombrado en tal cargo por el Papa Benedicto XVI el 3 de febrero de 2006 (Juan Pablo II lo había elegido Obispo el 12 de abril de 2003, asignándole la sede titular de Uzali y el encargo de auxiliar de Mercedes-Luján. Es Licenciado en Teología con orientación moral por la Universidad de Fribourg (Suiza); Licenciado en Derecho Canónico por la Pontificia Universidad de Salamanca (España) y Doctor en Teología Dogmática por la Pontificia Università della Santa Croce, de Roma.
En tanto, el profesor Omar Abboud, es una figura muy comprometida con el diálogo interreligioso de nuestro país. O. Abboud es Secretario General del Centro Islámico de la República Argentina y co-fundador del "Instituto del Diálogo Interreligioso" cuya actividad en el campo de la comprensión y la cooperación entre personas de distintos credos, etnias y culturas los hizo acreedores del premio Konex 2008 para dirigentes comunitarios.
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1. Cf. BENEDICTO XVI, Enc. Deus Caritas est.
2. Cf. CONC. ECUM. VAT. II, Decl. Nostrae aetate, n. 1; Decl. Dignitatis humanae, n.2.
3. Cf CONC. ECUM. VAT. II, Decl. Dignitatis humanae, n. 3
4. JUAN PABLO II, Discurso a los jóvenes musulmanes en el estadio de Casablanca (Marruecos), en Insegnamenti, VIII/2, 1985, p. 500.
5. Cf Benedicto XVI, Discurso con oportunidad del encuentro con los Delegados de las Iglesias y las Comunidades eclesiales y con los representantes de las varias Tradiciones religiosas, en: L'Osservatore Romano, 25 abril 2005, p. 4.
Monday, November 03, 2008
30º PEREGRINACION A PIE DEL PUEBLO DE DIOS DE ZARATE-CAMPANA A LUJAN
Bajo el lema “María nos enseña quien eres tú, Señor", en consonancia con el lema que durante el año guió la «misión joven» en la diócesis («¿Quién eres Tú, Señor?») se realizó la trigésima peregrinación del Pueblo de Dios de Zárate-Campana, con gran participación popular (según estimaciones de la policía departamental cerca de 15.000 personas) y con carácter interinstitucional. Según voluntarios que realizan la peregrinación desde el inicio, ha sido la más concurrida en estos años. En las columnas de peregrinos a pie que salieron de las diversas ciudades se notó una importante participación de jóvenes, entre los cuales muchos que habían recibido a los «jóvenes misioneros» en las distintas misiones de la diócesis.
Junto con el equipo de sacerdotes y de animadores laicos, diversas instituciones colaboran al unísono para el apoyo logístico, protección, de animación y contención de los peregrinos, tales como la sociedad de Bomberos voluntarios, la Cruz Roja, Caritas, la Policía de la Provincia, la Prefectura, con el apoyo y la supervisión de la Dirección de Culto de la Provincia. El seguimiento de los canales de televisión y las estaciones de radio fue constante, y asimismo la colaboración de algunos municipios con vehículos, médicos, ambulancias y difusión de lo atinente a la tradicional peregrinación popular.
Dos columnas principales salieron para unirse luego y atravesar el territorio diocesano. Desde la ciudad de Zárate, el 21 a las 16 y desde la ciudad de Campana a las 18, debiendo encontrarse ambas en la «rotonda de las Acacias» a las 19 y de allí hasta Luján para llegar aproximadamente entre las 02 y las 06. En el trayecto se suman las peregrinaciones de Baradero, Pilar, Exaltación de la Cruz, Belén de Escobar, Garín y San Antonio de Areco.
En esta peregrinación intervinieron las fuerzas vivas de todas las zonas que intervienen en la peregrinación, dentro de lo cual fue fundamental la asistencia en la organización de la Direccion de Culto de la provincia de Buenos Aires, en especial la ayuda del Sr. Director, Enrique Moltoni y del Lic. Daniel Carlos Santoro. A su vez también la ayuda de los Ministerios de Salud, Transporte, Seguridad, Infraestructura y las Municipalidades de Campana, Zárate que brindaron todo su apoyo en la organización. En especial las departamentales de Zárate-Campana, Exaltación de la Cruz, Pilar y Mercedes, así como también la asistencia durante toda la peregrinación de la Vial de Zárate y de Luján. También fue importante la ayuda fundamental de Defensa Civil, Bomberos Voluntarios, Prefectura Naval Argentina, Cruz Roja Argentina, y otras instituciones que hicieron de la peregrinación una fiesta de fe y de amor a la Virgen.
La peregrinación dio comienzo a las 16:00 desde la plaza Mitre de Zárate en donde Mons. Ariel Perez, cura párroco de Ntra. Sra. del Carmen, bendijo a los peregrinos. Por su parte, a las 18:20 nuestro Obispo Mons. Oscar Sarlinga hizo lo propio desde la Plaza E. Costa, de la ciudad de Campana, a la vez que dirigió unas palabras que fueron transmitidas por la radio FM “Santa María” y televisión. Por la noche Mons. Edgardo Galuppo, vicario general, bendijo a los peregrinos salidos desde Escobar. Ya comenzada la peregrinación y pasando por frente de la carcel 21 de Campana dos internos alcanzaron una urna a los peregrinos con las intenciones de todos los internos, para que las mismas fueran llevadas hasta el santuario de Luján. A las 22:00 se sumaron peregrinos de Los Cardales y a las 24:00 los fieles venidos desde Pilar, Areco y los 1000 peregrinos llegados en ómnibus hasta allí desde Baradero.
El día domingo, desde las 02.00 estuvieron los discípulos de Jesús y San Juan Bautista animando a los peregrinos que comenzaba a llegar, y desde las 03.30 el Sr. Obispo y un grupo de sacerdotes diocesanos escucharon confesiones. Dada la afluencia mayor de lo esperado, el Obispo celebró una misa a las 05.00 para quienes habían llegado al Santuario más de madrugada (y que a continuación iban partiendo), y luego presidió la misa central a las 06.00.
En su homilía Mons. Oscar Sarlinga se refirió al Santuario de Luján como «alma del Pueblo Argentino» y a la Virgen como Aquélla que nos muestra a Jesús, que nos dice quién es y cómo lo tenemos que amar, y dejarnos amar por él. Haciendo referencia al Año Paulino, dijo que Saulo, el perseguidor de la Iglesia tuvo un encuentro con Cristo Resucitado, quien lo eligió Apóstol, haciéndole ver Quién era, y que a su pregunta «Quién eres tú, Señor», le mostró la plenitud de su humanidad y divinidad, y al mismo tiempo la continuidad de su Persona en su Cuerpo y Pueblo, que es la Iglesia, respondiéndole: «Yo soy Jesús, a quien tú persigues». Saulo, el perseguidor de la Iglesia, se transformó así en San Pablo, el Apóstol de las Gentes.
Dijo luego el Obispo que hay dos actitudes fundamentales que nos hacen «ver» a Jesús en la Iglesia, y vivir como familia de Dios y como comunidad de fe. Son, dijo «la gratuidad y la humildad». Refiriéndose a la gratuidad la recordó como «don» por pura gracia, como dice San Pablo: “Pues el salario del pecado es la muerte; pero el don gratuito de Dios, la vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro” (Rom 6,23) y acotó que “el no creernos que somos nosotros mismos los que hacemos todo, el saber recibir por gracia, el valorar la justa colaboración de nuestra naturaleza humana y nuestra libertad” es lo que nos hace vivir «en y desde la gratuidad del don». “No gloriarnos a nosotros mismos, sino darle gloria a Dios por nuestra fe y obras, como afirma tantas veces San Pablo, quien no se avergüenza de la cruz de Cristo, ya que en Gálatas afirma: “En cuanto a mí, Dios me libre de gloriarme si no es en la cruz de nuestro Señor Jesucristo por la cual el mundo está crucificado para mí y yo para el mundo” (Gal 6, 14). “Esto nos hace ver el poder de Dios” (cfr1 Cor 1,24), dijo, el cual, como nos enseña Benedicto XVI, “(…) es diferente del poder humano; revela de hecho su amor: "Porque la necedad divina es más divina es más sabida que la sabiduría de los hombres, y la debilidad divina, más fuerte que la fuerza de los hombres" (ivi v. 25)” (1) .
Al mismo tiempo, dijo Mons. Sarlinga que la sociedad actual tiene una profunda necesidad de redescubrir el valor de la gratuidad, sobre todo porque en nuestro mundo a veces parece triunfar una lógica planteada exclusivamente en función del lucro y la ganancia a toda costa.
Luego, refiriéndose a la humildad, expresó que se trata de «la verdad de la persona, conocedora de su límite y de su grandeza, que viene de la imagen de Dios», y dijo que tantas veces «el orgullo y la soberbia se ven alimentados por el miedo, el temor de ser atacado, como los animales cuando se defienden ante un presunto ataque». Mencionó las letanías de la humildad, atribuidas al Cardenal Merry del Val, al que definió «un hombre espiritual», y que reproducimos a continuación:
Jesús manso y humilde de Corazón, -Óyeme.
(Después de cada frase decir: Líbrame Jesús)
Del deseo de ser lisonjeado,
Del deseo de ser alabado,
Del deseo de ser honrado,
Del deseo de ser aplaudido,
Del deseo de ser preferido a otros,
Del deseo de ser consultado,
Del deseo de ser aceptado,
Del temor de ser humillado,
Del temor de ser despreciado,
Del temor de ser reprendido,
Del temor de ser calumniado,
Del temor de ser olvidado,
Del temor de ser puesto en ridículo,
Del temor de ser injuriado,
Del temor de ser juzgado con malicia
(Después de cada frase decir: Jesús dame la gracia de desearlo)
Que otros sean más estimados que yo,
Que otros crezcan en la opinión del mundo y yo me eclipse,
Que otros sean alabados y de mí no se haga caso,
Que otros sean empleados en cargos y a mí se me juzgue inútil,
Que otros sean preferidos a mí en todo,
Que los demás sean más santos que yo con tal que yo sea todo lo santo que pueda,
—del Cardenal Merry del Val (1865-1930)
Gratuidad y humildad, son condiciones para la misión, para una dimensión misionera de toda nuestra pastoral y de nuestra entera vida cristiana, prodigada a favor de quienes más lo necesitan, y muy especialmente en estos tiempos. Pidió el Obispo, por fin, que esta peregrinación, que vino «como un río de vida», vuelva a las familias y a las comunidades como «ese mismo río de vida que retorna, fortalecido por el poder de Dios, y la intercesión de la Madre, Nuestra Señora de Luján, como una corriente de bendición para todos».
(1) Benedicto XVI, "El escándalo de la Cruz, sabiduría del cristiano"29 de octubre de 2008.
Junto con el equipo de sacerdotes y de animadores laicos, diversas instituciones colaboran al unísono para el apoyo logístico, protección, de animación y contención de los peregrinos, tales como la sociedad de Bomberos voluntarios, la Cruz Roja, Caritas, la Policía de la Provincia, la Prefectura, con el apoyo y la supervisión de la Dirección de Culto de la Provincia. El seguimiento de los canales de televisión y las estaciones de radio fue constante, y asimismo la colaboración de algunos municipios con vehículos, médicos, ambulancias y difusión de lo atinente a la tradicional peregrinación popular.
Dos columnas principales salieron para unirse luego y atravesar el territorio diocesano. Desde la ciudad de Zárate, el 21 a las 16 y desde la ciudad de Campana a las 18, debiendo encontrarse ambas en la «rotonda de las Acacias» a las 19 y de allí hasta Luján para llegar aproximadamente entre las 02 y las 06. En el trayecto se suman las peregrinaciones de Baradero, Pilar, Exaltación de la Cruz, Belén de Escobar, Garín y San Antonio de Areco.
En esta peregrinación intervinieron las fuerzas vivas de todas las zonas que intervienen en la peregrinación, dentro de lo cual fue fundamental la asistencia en la organización de la Direccion de Culto de la provincia de Buenos Aires, en especial la ayuda del Sr. Director, Enrique Moltoni y del Lic. Daniel Carlos Santoro. A su vez también la ayuda de los Ministerios de Salud, Transporte, Seguridad, Infraestructura y las Municipalidades de Campana, Zárate que brindaron todo su apoyo en la organización. En especial las departamentales de Zárate-Campana, Exaltación de la Cruz, Pilar y Mercedes, así como también la asistencia durante toda la peregrinación de la Vial de Zárate y de Luján. También fue importante la ayuda fundamental de Defensa Civil, Bomberos Voluntarios, Prefectura Naval Argentina, Cruz Roja Argentina, y otras instituciones que hicieron de la peregrinación una fiesta de fe y de amor a la Virgen.
La peregrinación dio comienzo a las 16:00 desde la plaza Mitre de Zárate en donde Mons. Ariel Perez, cura párroco de Ntra. Sra. del Carmen, bendijo a los peregrinos. Por su parte, a las 18:20 nuestro Obispo Mons. Oscar Sarlinga hizo lo propio desde la Plaza E. Costa, de la ciudad de Campana, a la vez que dirigió unas palabras que fueron transmitidas por la radio FM “Santa María” y televisión. Por la noche Mons. Edgardo Galuppo, vicario general, bendijo a los peregrinos salidos desde Escobar. Ya comenzada la peregrinación y pasando por frente de la carcel 21 de Campana dos internos alcanzaron una urna a los peregrinos con las intenciones de todos los internos, para que las mismas fueran llevadas hasta el santuario de Luján. A las 22:00 se sumaron peregrinos de Los Cardales y a las 24:00 los fieles venidos desde Pilar, Areco y los 1000 peregrinos llegados en ómnibus hasta allí desde Baradero.
El día domingo, desde las 02.00 estuvieron los discípulos de Jesús y San Juan Bautista animando a los peregrinos que comenzaba a llegar, y desde las 03.30 el Sr. Obispo y un grupo de sacerdotes diocesanos escucharon confesiones. Dada la afluencia mayor de lo esperado, el Obispo celebró una misa a las 05.00 para quienes habían llegado al Santuario más de madrugada (y que a continuación iban partiendo), y luego presidió la misa central a las 06.00.
En su homilía Mons. Oscar Sarlinga se refirió al Santuario de Luján como «alma del Pueblo Argentino» y a la Virgen como Aquélla que nos muestra a Jesús, que nos dice quién es y cómo lo tenemos que amar, y dejarnos amar por él. Haciendo referencia al Año Paulino, dijo que Saulo, el perseguidor de la Iglesia tuvo un encuentro con Cristo Resucitado, quien lo eligió Apóstol, haciéndole ver Quién era, y que a su pregunta «Quién eres tú, Señor», le mostró la plenitud de su humanidad y divinidad, y al mismo tiempo la continuidad de su Persona en su Cuerpo y Pueblo, que es la Iglesia, respondiéndole: «Yo soy Jesús, a quien tú persigues». Saulo, el perseguidor de la Iglesia, se transformó así en San Pablo, el Apóstol de las Gentes.
Dijo luego el Obispo que hay dos actitudes fundamentales que nos hacen «ver» a Jesús en la Iglesia, y vivir como familia de Dios y como comunidad de fe. Son, dijo «la gratuidad y la humildad». Refiriéndose a la gratuidad la recordó como «don» por pura gracia, como dice San Pablo: “Pues el salario del pecado es la muerte; pero el don gratuito de Dios, la vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro” (Rom 6,23) y acotó que “el no creernos que somos nosotros mismos los que hacemos todo, el saber recibir por gracia, el valorar la justa colaboración de nuestra naturaleza humana y nuestra libertad” es lo que nos hace vivir «en y desde la gratuidad del don». “No gloriarnos a nosotros mismos, sino darle gloria a Dios por nuestra fe y obras, como afirma tantas veces San Pablo, quien no se avergüenza de la cruz de Cristo, ya que en Gálatas afirma: “En cuanto a mí, Dios me libre de gloriarme si no es en la cruz de nuestro Señor Jesucristo por la cual el mundo está crucificado para mí y yo para el mundo” (Gal 6, 14). “Esto nos hace ver el poder de Dios” (cfr1 Cor 1,24), dijo, el cual, como nos enseña Benedicto XVI, “(…) es diferente del poder humano; revela de hecho su amor: "Porque la necedad divina es más divina es más sabida que la sabiduría de los hombres, y la debilidad divina, más fuerte que la fuerza de los hombres" (ivi v. 25)” (1) .
Al mismo tiempo, dijo Mons. Sarlinga que la sociedad actual tiene una profunda necesidad de redescubrir el valor de la gratuidad, sobre todo porque en nuestro mundo a veces parece triunfar una lógica planteada exclusivamente en función del lucro y la ganancia a toda costa.
Luego, refiriéndose a la humildad, expresó que se trata de «la verdad de la persona, conocedora de su límite y de su grandeza, que viene de la imagen de Dios», y dijo que tantas veces «el orgullo y la soberbia se ven alimentados por el miedo, el temor de ser atacado, como los animales cuando se defienden ante un presunto ataque». Mencionó las letanías de la humildad, atribuidas al Cardenal Merry del Val, al que definió «un hombre espiritual», y que reproducimos a continuación:
Jesús manso y humilde de Corazón, -Óyeme.
(Después de cada frase decir: Líbrame Jesús)
Del deseo de ser lisonjeado,
Del deseo de ser alabado,
Del deseo de ser honrado,
Del deseo de ser aplaudido,
Del deseo de ser preferido a otros,
Del deseo de ser consultado,
Del deseo de ser aceptado,
Del temor de ser humillado,
Del temor de ser despreciado,
Del temor de ser reprendido,
Del temor de ser calumniado,
Del temor de ser olvidado,
Del temor de ser puesto en ridículo,
Del temor de ser injuriado,
Del temor de ser juzgado con malicia
(Después de cada frase decir: Jesús dame la gracia de desearlo)
Que otros sean más estimados que yo,
Que otros crezcan en la opinión del mundo y yo me eclipse,
Que otros sean alabados y de mí no se haga caso,
Que otros sean empleados en cargos y a mí se me juzgue inútil,
Que otros sean preferidos a mí en todo,
Que los demás sean más santos que yo con tal que yo sea todo lo santo que pueda,
—del Cardenal Merry del Val (1865-1930)
Gratuidad y humildad, son condiciones para la misión, para una dimensión misionera de toda nuestra pastoral y de nuestra entera vida cristiana, prodigada a favor de quienes más lo necesitan, y muy especialmente en estos tiempos. Pidió el Obispo, por fin, que esta peregrinación, que vino «como un río de vida», vuelva a las familias y a las comunidades como «ese mismo río de vida que retorna, fortalecido por el poder de Dios, y la intercesión de la Madre, Nuestra Señora de Luján, como una corriente de bendición para todos».
(1) Benedicto XVI, "El escándalo de la Cruz, sabiduría del cristiano"29 de octubre de 2008.
Friday, October 31, 2008
VISITA DE MONS. OSCAR D. SARLINGA A PARAY-LE-MONIAL EN LA BASÍLICA DEL SAGRADO CORAZÓN DE JESÚS
El Sr. Obispo ha retomado la atención en la Curia diocesana desde el lunes 27 por la mañana en adelante.
Luego de iniciado el retiro espiritual del clero de Zárate-Campana, habiendo sido invitado meses atrás por el Rector de los Santuarios del Sagrado Corazón, P. Édouard Marot, el Obispo Mons. Oscar D. Sarlinga asistió a la ciudad de Paray-le-Monial (en la Borgoña francesa), pequeña ciudad actualmente de 10.000 habitantes, dónde apareció Jesús a Santa Marguerite-Marie Alacoque (1647-1690), revelándole su Corazón ardiente de amor por la humanidad. Las celebraciones centrales presididas por Mons. Sarlinga tuvieron lugar el 18 de octubre (festividad de San Lucas, evangelista) y el domingo 19, en la solemnidad de Santa Margarita María Alacoque, en presencia de las reliquias de esta última. Los actos duraron la semana entera, e incluyeron acontecimientos tales como adoración del Santísimo Sacramento en la Capilla de las apariciones (en el Monasterio de la Visitación), encuentro con los peregrinos, catequesis al Pueblo de Dios en la Basílica, y teatro religioso, en una versión especial (llamada “Ce divin feu”, “Ese fuego divino”) llevada a cabo por actores profesionales, sobre la base de los escritos de Santa Margarita María y de San Claudio La Colombière, y que está teniendo un inesperado éxito en Francia.
El gran Santuario (iglesia declarada Basílica por el Papa Pío IX en 1875) funciona en un espléndido y restaurado templo medieval (que era el priorato de Cluny), y ha cobrado un renovado auge peregrinacional sobre todo desde la visita pastoral de S.S. Juan Pablo II, el 5 de octubre de 1986, transformándose en un centro de peregrinación de primer orden, no sólo europeo sino internacional.
En el contexto del Año Paulino, Mons. Oscar Sarlinga recordó en una de las catequesis al pueblo reunido en la Basílica que Juan Pablo II había dicho en la homilía de su visita al Santuario que “Con Pablo de Tarso, con Margarita María, proclamamos la misma certidumbre: ni la muerte, ni la vida, ni el presente ni el futuro, ni las potencias, ni alguna otra criatura, nada podrá separarnos del amor de Dios que está en Jesucristo” y que agregó “Hoy nos encontramos en este lugar de Paray-le-Monial ara renovar en nosotros mismos esta certidumbre: «Yo les daré un corazón…»” (Juan Pablo II, PÈLERINAGE EN FRANCE,HOMÉLIE DU PAPE JEAN-PAUL II, Paray-le-Monial (France), 5 octobre 1986, n. 9).
Rememoró también el Obispo Oscar, impresionado por la presencia de tan numerosas familias jóvenes con hijos pequeños, que el Papa había dicho en aquella oportunidad que “Delante del Corazón abierto de Cristo, buscamos extraer de él aquel amor verdadero que necesitan nuestras familias, pues (…) la célula familiar es fundamental para edificar la civilización del amor”. Dijo también que el Sagrado Corazón no era “una simple devoción” sino “el misterio mismo de la humanidad de Jesucristo, unida a su divinidad en la Persona del Verbo, y que es este Jesús, que nos ama, que nos sana, que nos eleva a la dignidad de hijos de Dios y autores de una civilización nueva que estamos llamados a construir” y que, en ese contexto, teníamos que considerar las apariciones del Sagrado Corazón como “una continuación a lo largo de los siglos de las apariciones históricas del Resucitado a las piadosas mujeres, a los apóstoles y a los discípulos, para afirmarlos en la fe y darles esperanza para transmitirla, para transmitir un amor transformante que puede cambiar la humanidad”.
Cabe destacar que desde varios años atrás las autoridades del Santuario han tenido la iniciativa de «peregrinar» en distintos lugares del mundo con las reliquias de Santa Margarita María, llevando el mensaje del Sagrado Corazón. Así lo han hecho en distintos países de América (que se han consagrado al Sagrado Corazón de Jesús) y también recientemente en diversas diócesis argentinas.
Luego de recibir en la Curia al P. Édouard Marot y a la Sra. Alicia Beauvisage, organizadora de la peregrinación con las reliquias, Mons. Oscar Sarlinga los invitó a peregrinar en 2009 en la diócesis de Zárate-Campana, que cuenta con el Monasterio de la Visitación (en Pilar), orden fundada por el Obispo San Francisco de Sales y a la que pertenecía Santa Margarita María.
Las reliquias de Santa Margarita María llegarán el 25 de marzo de 2009, y luego de permanecer en el Monasterio de la Visitación, serán llevadas para su veneración a las parroquias de San Antonio de Padua, de Presidente Derqui (Pilar), a la catedral de Santa Florentina (Campana) y a la iglesia cocatedral de la Natividad del Señor (Escobar), donde se acompañarán con una misión y catequesis acerca del Sagrado Corazón. Las parroquias designadas fueron aquellas que solicitaron por escrito el recibimiento de las reliquias apenas fue mencionada la noticia en el infodiócesis (boletín diocesano).
Desde Escobar las reliquias partirán el sábado 4 de abril, en las vísperas del Domingo de Ramos, hacia Portugal, previa misa presidida por Mons. Oscar Sarlinga en la iglesia cocatedral.
Paray le Monial y el Corazón de Jesú
La ciudad nació en torno a un monasterio hacia 970. El gran monje constructor Saint Hugues de Semur (siglo XII), abad de Cluny, fue quién comenzó las obras en la iglesia que hoy conocemos. Habiendo sobrevivido a la revolución después de que los frailes la hubieran abandonado, gracias a que la compró la ciudad, fue restaurada a partir de 1856 por Eugène Millet, alumno del célebre arquitecto Violet-le-Duc. Este monumento esencial en Borgoña representa el modelo mejor logrado de la arquitectura romance cluniacense.
Desde 1985, el Obispo de la diócesis de Autun, ha confiado el Santuario a sacerdotes y laicos de la Comunidad del Emmanuel. Paray le Monial acoge cada verano exposiciones temporales vinculadas a la próxima reapertura del museo eucarístico del Hiéron (2004). Abierto todo el año, el Santuario de Paray-le-Monial comprende varios sitios de rezo y de acogida fácilmente accesibles. Peregrinos individuales, grupos y visitantes podrán descubrir en éste el mensaje y la espiritualidad del Corazón de Jesús. Los Capellanes de Paray-le-Monial se encargan de la acogida en el Santuario. La Comunidad del Emmanuel nació en París por iniciativa de Pierre Goursat (1914-1991) y Martine Laffitte-Catta, sobre la base de la experiencia de un grupo de oración de la Renovación Carismática.
En 1975 la llegada de la Comunidad a Paray le Monial, lugar de las apariciones del Corazón de Jesús a santa Margarita María de Alacoque (1647-1690) --en la primera sesión participaron unas 700 personas--, marcó una etapa importante de su historia y el inicio de su difusión a nivel internacional. A partir de los años noventa cada vez son más los Obispos que confían a la comunidad misiones parroquiales y la animación de las parroquias. El 8 de diciembre de 1992 el Consejo Pontificio para los Laicos decretó el reconocimiento de la Comunidad como asociación internacional de fieles de derecho pontificio
Luego de iniciado el retiro espiritual del clero de Zárate-Campana, habiendo sido invitado meses atrás por el Rector de los Santuarios del Sagrado Corazón, P. Édouard Marot, el Obispo Mons. Oscar D. Sarlinga asistió a la ciudad de Paray-le-Monial (en la Borgoña francesa), pequeña ciudad actualmente de 10.000 habitantes, dónde apareció Jesús a Santa Marguerite-Marie Alacoque (1647-1690), revelándole su Corazón ardiente de amor por la humanidad. Las celebraciones centrales presididas por Mons. Sarlinga tuvieron lugar el 18 de octubre (festividad de San Lucas, evangelista) y el domingo 19, en la solemnidad de Santa Margarita María Alacoque, en presencia de las reliquias de esta última. Los actos duraron la semana entera, e incluyeron acontecimientos tales como adoración del Santísimo Sacramento en la Capilla de las apariciones (en el Monasterio de la Visitación), encuentro con los peregrinos, catequesis al Pueblo de Dios en la Basílica, y teatro religioso, en una versión especial (llamada “Ce divin feu”, “Ese fuego divino”) llevada a cabo por actores profesionales, sobre la base de los escritos de Santa Margarita María y de San Claudio La Colombière, y que está teniendo un inesperado éxito en Francia.
El gran Santuario (iglesia declarada Basílica por el Papa Pío IX en 1875) funciona en un espléndido y restaurado templo medieval (que era el priorato de Cluny), y ha cobrado un renovado auge peregrinacional sobre todo desde la visita pastoral de S.S. Juan Pablo II, el 5 de octubre de 1986, transformándose en un centro de peregrinación de primer orden, no sólo europeo sino internacional.
En el contexto del Año Paulino, Mons. Oscar Sarlinga recordó en una de las catequesis al pueblo reunido en la Basílica que Juan Pablo II había dicho en la homilía de su visita al Santuario que “Con Pablo de Tarso, con Margarita María, proclamamos la misma certidumbre: ni la muerte, ni la vida, ni el presente ni el futuro, ni las potencias, ni alguna otra criatura, nada podrá separarnos del amor de Dios que está en Jesucristo” y que agregó “Hoy nos encontramos en este lugar de Paray-le-Monial ara renovar en nosotros mismos esta certidumbre: «Yo les daré un corazón…»” (Juan Pablo II, PÈLERINAGE EN FRANCE,HOMÉLIE DU PAPE JEAN-PAUL II, Paray-le-Monial (France), 5 octobre 1986, n. 9).
Rememoró también el Obispo Oscar, impresionado por la presencia de tan numerosas familias jóvenes con hijos pequeños, que el Papa había dicho en aquella oportunidad que “Delante del Corazón abierto de Cristo, buscamos extraer de él aquel amor verdadero que necesitan nuestras familias, pues (…) la célula familiar es fundamental para edificar la civilización del amor”. Dijo también que el Sagrado Corazón no era “una simple devoción” sino “el misterio mismo de la humanidad de Jesucristo, unida a su divinidad en la Persona del Verbo, y que es este Jesús, que nos ama, que nos sana, que nos eleva a la dignidad de hijos de Dios y autores de una civilización nueva que estamos llamados a construir” y que, en ese contexto, teníamos que considerar las apariciones del Sagrado Corazón como “una continuación a lo largo de los siglos de las apariciones históricas del Resucitado a las piadosas mujeres, a los apóstoles y a los discípulos, para afirmarlos en la fe y darles esperanza para transmitirla, para transmitir un amor transformante que puede cambiar la humanidad”.
Cabe destacar que desde varios años atrás las autoridades del Santuario han tenido la iniciativa de «peregrinar» en distintos lugares del mundo con las reliquias de Santa Margarita María, llevando el mensaje del Sagrado Corazón. Así lo han hecho en distintos países de América (que se han consagrado al Sagrado Corazón de Jesús) y también recientemente en diversas diócesis argentinas.
Luego de recibir en la Curia al P. Édouard Marot y a la Sra. Alicia Beauvisage, organizadora de la peregrinación con las reliquias, Mons. Oscar Sarlinga los invitó a peregrinar en 2009 en la diócesis de Zárate-Campana, que cuenta con el Monasterio de la Visitación (en Pilar), orden fundada por el Obispo San Francisco de Sales y a la que pertenecía Santa Margarita María.
Las reliquias de Santa Margarita María llegarán el 25 de marzo de 2009, y luego de permanecer en el Monasterio de la Visitación, serán llevadas para su veneración a las parroquias de San Antonio de Padua, de Presidente Derqui (Pilar), a la catedral de Santa Florentina (Campana) y a la iglesia cocatedral de la Natividad del Señor (Escobar), donde se acompañarán con una misión y catequesis acerca del Sagrado Corazón. Las parroquias designadas fueron aquellas que solicitaron por escrito el recibimiento de las reliquias apenas fue mencionada la noticia en el infodiócesis (boletín diocesano).
Desde Escobar las reliquias partirán el sábado 4 de abril, en las vísperas del Domingo de Ramos, hacia Portugal, previa misa presidida por Mons. Oscar Sarlinga en la iglesia cocatedral.
Paray le Monial y el Corazón de Jesú
La ciudad nació en torno a un monasterio hacia 970. El gran monje constructor Saint Hugues de Semur (siglo XII), abad de Cluny, fue quién comenzó las obras en la iglesia que hoy conocemos. Habiendo sobrevivido a la revolución después de que los frailes la hubieran abandonado, gracias a que la compró la ciudad, fue restaurada a partir de 1856 por Eugène Millet, alumno del célebre arquitecto Violet-le-Duc. Este monumento esencial en Borgoña representa el modelo mejor logrado de la arquitectura romance cluniacense.
Desde 1985, el Obispo de la diócesis de Autun, ha confiado el Santuario a sacerdotes y laicos de la Comunidad del Emmanuel. Paray le Monial acoge cada verano exposiciones temporales vinculadas a la próxima reapertura del museo eucarístico del Hiéron (2004). Abierto todo el año, el Santuario de Paray-le-Monial comprende varios sitios de rezo y de acogida fácilmente accesibles. Peregrinos individuales, grupos y visitantes podrán descubrir en éste el mensaje y la espiritualidad del Corazón de Jesús. Los Capellanes de Paray-le-Monial se encargan de la acogida en el Santuario. La Comunidad del Emmanuel nació en París por iniciativa de Pierre Goursat (1914-1991) y Martine Laffitte-Catta, sobre la base de la experiencia de un grupo de oración de la Renovación Carismática.
En 1975 la llegada de la Comunidad a Paray le Monial, lugar de las apariciones del Corazón de Jesús a santa Margarita María de Alacoque (1647-1690) --en la primera sesión participaron unas 700 personas--, marcó una etapa importante de su historia y el inicio de su difusión a nivel internacional. A partir de los años noventa cada vez son más los Obispos que confían a la comunidad misiones parroquiales y la animación de las parroquias. El 8 de diciembre de 1992 el Consejo Pontificio para los Laicos decretó el reconocimiento de la Comunidad como asociación internacional de fieles de derecho pontificio
ORDENACIÓN DIACONAL Y SEGUNDA FASE DE LA MISION CAMPANA
Una nueva ordenación diaconal ha venido a acrecentar los obreros para la mies en la diócesis de Zárate-Campana. En efecto, el sábado 11 de octubre el acólito Lucas Martínez recibió el diaconado, en camino al sacerdocio ministerial. La iglesia catedral se encontraba repleta, entre fieles de la misma, parientes y amigos del ordenado y jóvenes del movimiento «Santa María de la Estrella» y del grupo juvenil de la catedral de Campana, quienes se hallaban en esos días realizando la «misión joven» en dos barrios de la ciudad, Dalera y San Martín de Porres.
Previo a la ordenación diaconal, el Obispo tuvo una celebración anterior (a las 16), en la iglesia criptal, en la que confirió el ministerio del acolitado al seminarista Alfredo Antonelli, al que asistieron numerosos sacerdotes, y seminaristas de Zárate-Campana y del Seminario de Gualeguaychú.
En la celebración de ordenación diaconal fueron 15 los sacerdotes concelebrantes, entre los cuales el vicario general, Mons. Galuppo, el pro-vicario general, Mons. Herrera, y el cura párroco de Santa Florentina y Delegado diocesano para la Pastoral Juvenil, Pbro. Hugo Lovatto, entre otros. Se hallaba presente también el Provincial de los Legionarios de Cristo, R.P. Deomar de Guedes y el diácono Mario Medina, así como cinco candidatos al diaconado permanente de los diez que existen en la diócesis. Asistieron a la celebración los padres del ordenado, y asimismo su hermano y hermana, con sus respectivos cónyuges e hijos pequeños.
En su homilía, Mons. Sarlinga, luego de mencionar la diferencia entre los diáconos permanentes y los diáconos «transeúntes», es decir, en camino al sacerdocio ministerial, recordó el Obispo que el diaconado es una institución divino–apostólica en sentido en que «existe el sacramento del orden por voluntad de Jesucristo y los diáconos por institución apostólica, como enseña el Concilio Vaticano II: «El ministerio eclesiástico, instituido por Dios, está ejercido en diversos órdenes que ya desde antiguo reciben los nombres de obispos, presbíteros y diáconos» (1).
Acerca de su institución por los apóstoles, mencionó el pasaje bíblico: “Por aquellos días, al multiplicarse los discípulos, hubo quejas de los helenistas contra los hebreos, porque sus viudas eran desatendidas en la asistencia cotidiana. Los Doce convocaron la asamblea de los discípulos y dijeron: «No parece bien que nosotros abandonemos la Palabra de Dios por servir a las mesas. Por tanto, hermanos, buscad de entre vosotros a siete hombres, de buena fama, llenos de Espíritu y de sabiduría, y los pondremos al frente de este cargo; mientras que nosotros nos dedicaremos a la oración y al ministerio de la Palabra». Pareció bien la propuesta a toda la asamblea y escogieron a Esteban, hombre lleno de fe y de Espíritu Santo, a Felipe, a Prócoro, a Nicanor, a Timón, a Pármena y a Nicolás, prosélito de Antioquía; los presentaron a los apóstoles y, habiendo hecho oración, les impusieron las manos” (He 6,1–6);
Luego de recordar la gracia de ser ordenado en el Año Paulino Jubilar, hizo alusión Mons. Sarlinga al testimonio acerca del ministerio de los diáconos de parte de San Pablo a los filipenses: “Pablo y Timoteo, siervos de Cristo Jesús, a todos los santos en Cristo Jesús, que están en Filipos, con los epíscopos y diáconos” (Flp 1,1), así como del antiquísimo documento de la Didaché, de alrededor del año 90, que ordena que se elijan «obispos y diáconos, dignos del Señor»(2).
Después de aludir al hecho de que el diaconado no es sacerdocio ministerial, puesto que a los diáconos sólo el obispo les impone las manos, pero «no en orden al sacerdocio, sino en orden al ministerio», mencionó también la Traditio apostolica de San Hipólito, la cual explica: «La razón de que solo el obispo imponga las manos es porque el diácono no se ordena para el sacerdocio, sino para el servicio del obispo; para hacer lo que este le indique»(3), y acotó que «esto tiene un profundo sentido pastoral, pues no se trata de un servicio de carácter servil al Obispo sino en lo que este último indique para el servicio profundo, dedicado, íntegro, del Pueblo de Dios», a imagen del Siervo de Yahweh, consumado en Jesucristo.
Hizo mención el Obispo sobre el carácter sacramental del diaconado, que también dice relación al carácter diaconal del sacerdocio de Cristo en tanto que Él es «Ebed–Yahveh» del cántico de Isaías, servidor del Padre y de los hombres, conforme al decir del Obispo y Mártir San Ignacio de Antioquía: «Los diáconos son los imitadores de Cristo porque ellos son los servidores del obispo, como Cristo es el servidor de Dios Padre», por eso agrega: «A los diáconos ha sido confiada la “diaconía” de Cristo».
Dentro de las dimensiones de la «diafonía», la cual, añadió Mons. Sarlinga, no se pierde con el presbiterado y el episcopado, dijo que los oficios «diaconales» que presenta el Nuevo testamento dicen siempre relación a un servicio en orden a la salvación. “Así, los apóstoles se reservan una «diakonia» de la Palabra (He 6,4); Pedro dijo que Judas participó en la «diakonia» apostólica (He 1,17); Matías es llamado a suplirle en esa «diakonia» (He 1,2); San Pablo cumple la «diakonia» recibida de Jesús (He 20,24), diakonia de la reconciliación (2Cor 5,18), diakonia para la edificación del Cuerpo de Cristo (Ef 4,12), diakonia de Cristo (1Tim 1,12). Por eso los apóstoles son diáconos de una Nueva Alianza (2Cor 3,6); diáconos de Dios (2Cor 6,14); diáconos de la justicia (2Cor 11,12–15); diáconos del Evangelio (Ef 3,7; Col 1,23); diáconos del Cuerpo de Cristo, que es la Iglesia (Ef 3,7; Col 1,23). Al mismo Cristo lo llama San Pablo diácono (Ro 15,8)”.
Refiriéndose luego al «vaciamiento» o «anonadamiento» para poder servir la Causa del Evangelio, citó Mons. Sarlinga al apóstol San Pablo, en su famoso pasaje de la carta a los Filipenses, en que afirma que Cristo "se despojó de sí mismo, tomando la condición de siervo" (Flp 2, 7). Cristo es el ejemplo que debemos contemplar. En el evangelio dijo a sus discípulos que no había venido "a ser servido, sino a servir" (cf. Mt 20, 28). Y recordó el Obispo que, en particular, durante la última Cena, después de explicar nuevamente a los Apóstoles que estaba en medio de ellos "como el que sirve" (Lc 22, 27), realizó el gesto humilde, reservado a los esclavos, de lavar los pies a los Doce, dando así ejemplo para que sus discípulos lo imitaran en el servicio y en el amor recíproco.
El servicio viene del Amor, dijo el Obispo. Y, en efecto, “como escribió S.S. Benedicto XVI en la Encíclica “Deus caritas est”, “el amor puede ser "mandado" por Dios “porque antes es dado” , y nos lo dio Dios enteramente, puesto que nos entregó a su propio Hijo. Expresó también, continuando su homilía, que el espíritu de servicio viene del Espíritu de Dios, el cual, como lo dijera en su carta pastoral en el Inicio del Año Paulino Universal: “(…) nos identifica con Jesús-Camino, abriéndonos al misterio de salvación para que seamos hijos del Padre y hermanos unos de otros; nos identifica con Jesús-Verdad, enseñándonos a renunciar a nuestras mentiras y propias ambiciones, y nos identifica con Jesús-Vida, permitiéndonos abrazar su plan de amor y entregarnos para que todos tengan vida en Él”.
Exhortó al diácono a la humildad, y a practicar y ejercer la corrección fraterna, a la que calificó “bastante abandonada en nuestras comunidades”, y a dejarse también corregir fraternalmente, siempre con humildad y amor, por los hermanos, teniendo en cuenta incluso la sabiduría expresada en el libro de los Proverbios (Prov 27,6): “Mejores son las heridas de quien ama que los besos engañosos del que odia”.
Luego de exhortar a no defraudar nunca al pueblo de Dios que espera de su ministerio, recordó el Obispo, junto con la pobreza entendida en sentido tradicional (recordando que los pobres han de ser causa de nuestra opción preferencial), nuevas formas de pobreza tales como la pérdida del sentido de la vida y de una verdad sobre la cual construir su existencia; así como la existencia de numerosos jóvenes que piden encontrar hombres que sepan escucharlos y aconsejarlos en las dificultades de la vida. Exhortó a todos los fieles de la diócesis de Zarate-Campana a evangelizar, procurando el encuentro con Cristo, quien da un nuevo horizonte a la vida, que trasciende todo horizonte humano.
Al término de la celebración de ordenación, se tuvo un ágape fraterno, muy concurrido, en los salones de la iglesia catedral.
El domingo 12 en la Misa de 19, Mons. Oscar celebró la Santa Misa de clausura de la Misión Joven. Con el templo nuevamente repleto de fieles y de los 90 jóvenes provenientes del Mov. de Santa María la Estrella y del Grupo de jóvenes de la parroquia Catedral.
La celebración liturgica estuvo animada por la comunidad del Cenacolo, quienes cantaron y animaron la celebración. Se encontraban presente Mons. Herrera, Mons. Marcelo Monteagudo, delegado para las misiones, el Pbro. Higo Lovatto, párroco de la Parroquia Catedral Sta. Florentina, el nuevo diácono y el vicario parroquial.
Con referencia a la misión los jóvenes estuvieron realizando sus actividades en las comunidades de San Martín de Porres y de Ntra. Sra. de la Paz, dos centros que pertecen a la jurisdicción de la parroquia Catedral.
A diferencia del año 2007, donde también se realizó esta actividad misionera, hubo una mayor acogida por la gente. Pudiendo los misioneros entrar en los hogares para rezar, conversar y compartir un testimonio joven de fe en Cristo y su Iglesia.
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1. Concilio Ecuménico Vaticano II, Constitución dogmática sobre la Iglesia «Lumen Gentium», 10.
2. Did, 15.
3. Tradit. apost., 8.
4. BENEDICTO XVI, Enc. Deus caritas est, n. 14.
Previo a la ordenación diaconal, el Obispo tuvo una celebración anterior (a las 16), en la iglesia criptal, en la que confirió el ministerio del acolitado al seminarista Alfredo Antonelli, al que asistieron numerosos sacerdotes, y seminaristas de Zárate-Campana y del Seminario de Gualeguaychú.
En la celebración de ordenación diaconal fueron 15 los sacerdotes concelebrantes, entre los cuales el vicario general, Mons. Galuppo, el pro-vicario general, Mons. Herrera, y el cura párroco de Santa Florentina y Delegado diocesano para la Pastoral Juvenil, Pbro. Hugo Lovatto, entre otros. Se hallaba presente también el Provincial de los Legionarios de Cristo, R.P. Deomar de Guedes y el diácono Mario Medina, así como cinco candidatos al diaconado permanente de los diez que existen en la diócesis. Asistieron a la celebración los padres del ordenado, y asimismo su hermano y hermana, con sus respectivos cónyuges e hijos pequeños.
En su homilía, Mons. Sarlinga, luego de mencionar la diferencia entre los diáconos permanentes y los diáconos «transeúntes», es decir, en camino al sacerdocio ministerial, recordó el Obispo que el diaconado es una institución divino–apostólica en sentido en que «existe el sacramento del orden por voluntad de Jesucristo y los diáconos por institución apostólica, como enseña el Concilio Vaticano II: «El ministerio eclesiástico, instituido por Dios, está ejercido en diversos órdenes que ya desde antiguo reciben los nombres de obispos, presbíteros y diáconos» (1).
Acerca de su institución por los apóstoles, mencionó el pasaje bíblico: “Por aquellos días, al multiplicarse los discípulos, hubo quejas de los helenistas contra los hebreos, porque sus viudas eran desatendidas en la asistencia cotidiana. Los Doce convocaron la asamblea de los discípulos y dijeron: «No parece bien que nosotros abandonemos la Palabra de Dios por servir a las mesas. Por tanto, hermanos, buscad de entre vosotros a siete hombres, de buena fama, llenos de Espíritu y de sabiduría, y los pondremos al frente de este cargo; mientras que nosotros nos dedicaremos a la oración y al ministerio de la Palabra». Pareció bien la propuesta a toda la asamblea y escogieron a Esteban, hombre lleno de fe y de Espíritu Santo, a Felipe, a Prócoro, a Nicanor, a Timón, a Pármena y a Nicolás, prosélito de Antioquía; los presentaron a los apóstoles y, habiendo hecho oración, les impusieron las manos” (He 6,1–6);
Luego de recordar la gracia de ser ordenado en el Año Paulino Jubilar, hizo alusión Mons. Sarlinga al testimonio acerca del ministerio de los diáconos de parte de San Pablo a los filipenses: “Pablo y Timoteo, siervos de Cristo Jesús, a todos los santos en Cristo Jesús, que están en Filipos, con los epíscopos y diáconos” (Flp 1,1), así como del antiquísimo documento de la Didaché, de alrededor del año 90, que ordena que se elijan «obispos y diáconos, dignos del Señor»(2).
Después de aludir al hecho de que el diaconado no es sacerdocio ministerial, puesto que a los diáconos sólo el obispo les impone las manos, pero «no en orden al sacerdocio, sino en orden al ministerio», mencionó también la Traditio apostolica de San Hipólito, la cual explica: «La razón de que solo el obispo imponga las manos es porque el diácono no se ordena para el sacerdocio, sino para el servicio del obispo; para hacer lo que este le indique»(3), y acotó que «esto tiene un profundo sentido pastoral, pues no se trata de un servicio de carácter servil al Obispo sino en lo que este último indique para el servicio profundo, dedicado, íntegro, del Pueblo de Dios», a imagen del Siervo de Yahweh, consumado en Jesucristo.
Hizo mención el Obispo sobre el carácter sacramental del diaconado, que también dice relación al carácter diaconal del sacerdocio de Cristo en tanto que Él es «Ebed–Yahveh» del cántico de Isaías, servidor del Padre y de los hombres, conforme al decir del Obispo y Mártir San Ignacio de Antioquía: «Los diáconos son los imitadores de Cristo porque ellos son los servidores del obispo, como Cristo es el servidor de Dios Padre», por eso agrega: «A los diáconos ha sido confiada la “diaconía” de Cristo».
Dentro de las dimensiones de la «diafonía», la cual, añadió Mons. Sarlinga, no se pierde con el presbiterado y el episcopado, dijo que los oficios «diaconales» que presenta el Nuevo testamento dicen siempre relación a un servicio en orden a la salvación. “Así, los apóstoles se reservan una «diakonia» de la Palabra (He 6,4); Pedro dijo que Judas participó en la «diakonia» apostólica (He 1,17); Matías es llamado a suplirle en esa «diakonia» (He 1,2); San Pablo cumple la «diakonia» recibida de Jesús (He 20,24), diakonia de la reconciliación (2Cor 5,18), diakonia para la edificación del Cuerpo de Cristo (Ef 4,12), diakonia de Cristo (1Tim 1,12). Por eso los apóstoles son diáconos de una Nueva Alianza (2Cor 3,6); diáconos de Dios (2Cor 6,14); diáconos de la justicia (2Cor 11,12–15); diáconos del Evangelio (Ef 3,7; Col 1,23); diáconos del Cuerpo de Cristo, que es la Iglesia (Ef 3,7; Col 1,23). Al mismo Cristo lo llama San Pablo diácono (Ro 15,8)”.
Refiriéndose luego al «vaciamiento» o «anonadamiento» para poder servir la Causa del Evangelio, citó Mons. Sarlinga al apóstol San Pablo, en su famoso pasaje de la carta a los Filipenses, en que afirma que Cristo "se despojó de sí mismo, tomando la condición de siervo" (Flp 2, 7). Cristo es el ejemplo que debemos contemplar. En el evangelio dijo a sus discípulos que no había venido "a ser servido, sino a servir" (cf. Mt 20, 28). Y recordó el Obispo que, en particular, durante la última Cena, después de explicar nuevamente a los Apóstoles que estaba en medio de ellos "como el que sirve" (Lc 22, 27), realizó el gesto humilde, reservado a los esclavos, de lavar los pies a los Doce, dando así ejemplo para que sus discípulos lo imitaran en el servicio y en el amor recíproco.
El servicio viene del Amor, dijo el Obispo. Y, en efecto, “como escribió S.S. Benedicto XVI en la Encíclica “Deus caritas est”, “el amor puede ser "mandado" por Dios “porque antes es dado” , y nos lo dio Dios enteramente, puesto que nos entregó a su propio Hijo. Expresó también, continuando su homilía, que el espíritu de servicio viene del Espíritu de Dios, el cual, como lo dijera en su carta pastoral en el Inicio del Año Paulino Universal: “(…) nos identifica con Jesús-Camino, abriéndonos al misterio de salvación para que seamos hijos del Padre y hermanos unos de otros; nos identifica con Jesús-Verdad, enseñándonos a renunciar a nuestras mentiras y propias ambiciones, y nos identifica con Jesús-Vida, permitiéndonos abrazar su plan de amor y entregarnos para que todos tengan vida en Él”.
Exhortó al diácono a la humildad, y a practicar y ejercer la corrección fraterna, a la que calificó “bastante abandonada en nuestras comunidades”, y a dejarse también corregir fraternalmente, siempre con humildad y amor, por los hermanos, teniendo en cuenta incluso la sabiduría expresada en el libro de los Proverbios (Prov 27,6): “Mejores son las heridas de quien ama que los besos engañosos del que odia”.
Luego de exhortar a no defraudar nunca al pueblo de Dios que espera de su ministerio, recordó el Obispo, junto con la pobreza entendida en sentido tradicional (recordando que los pobres han de ser causa de nuestra opción preferencial), nuevas formas de pobreza tales como la pérdida del sentido de la vida y de una verdad sobre la cual construir su existencia; así como la existencia de numerosos jóvenes que piden encontrar hombres que sepan escucharlos y aconsejarlos en las dificultades de la vida. Exhortó a todos los fieles de la diócesis de Zarate-Campana a evangelizar, procurando el encuentro con Cristo, quien da un nuevo horizonte a la vida, que trasciende todo horizonte humano.
Al término de la celebración de ordenación, se tuvo un ágape fraterno, muy concurrido, en los salones de la iglesia catedral.
El domingo 12 en la Misa de 19, Mons. Oscar celebró la Santa Misa de clausura de la Misión Joven. Con el templo nuevamente repleto de fieles y de los 90 jóvenes provenientes del Mov. de Santa María la Estrella y del Grupo de jóvenes de la parroquia Catedral.
La celebración liturgica estuvo animada por la comunidad del Cenacolo, quienes cantaron y animaron la celebración. Se encontraban presente Mons. Herrera, Mons. Marcelo Monteagudo, delegado para las misiones, el Pbro. Higo Lovatto, párroco de la Parroquia Catedral Sta. Florentina, el nuevo diácono y el vicario parroquial.
Con referencia a la misión los jóvenes estuvieron realizando sus actividades en las comunidades de San Martín de Porres y de Ntra. Sra. de la Paz, dos centros que pertecen a la jurisdicción de la parroquia Catedral.
A diferencia del año 2007, donde también se realizó esta actividad misionera, hubo una mayor acogida por la gente. Pudiendo los misioneros entrar en los hogares para rezar, conversar y compartir un testimonio joven de fe en Cristo y su Iglesia.
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1. Concilio Ecuménico Vaticano II, Constitución dogmática sobre la Iglesia «Lumen Gentium», 10.
2. Did, 15.
3. Tradit. apost., 8.
4. BENEDICTO XVI, Enc. Deus caritas est, n. 14.
TOMA DE POSESIÓN EN CATEDRAL SANTA FLORENTINA DEL P. HUGO LOVATTO
El Sr. Obispo recordó que la parroquia de Santa Florentina continuará contando con un vicario parroquial, el Pbro. Mauricio Aracena, y que, como había sido anunciado, tendrá la gracia de la próxima ordenación diaconal (el 11 de octubre) del acólito Lucas Martínez, el cual, una vez diácono, será adscripto a la iglesia catedral.
Mons. Oscar Sarlinga hizo alusión en su homilía a la necesaria y vital comunión con la Iglesia, y citó al Directorio para la vida y misión de los presbíteros, de la Santa Sede, en lo referente a la comunión traducida en amor efectivo por el pueblo cristiano que se le encomienda al párroco: “Hombre de comunión, el sacerdote no podrá expresar su amor al Señor y a la Iglesia sin traducirlo en un amor efectivo e incondicionado por el Pueblo cristiano, objeto de sus desvelos pastorales. Como Cristo, debe hacerse "como una transparencia suya en medio del rebaño" que le ha sido confiado poniéndose en relación positiva y de promoción con respecto a los fieles laicos. Ha de poner al servicio de los laicos todo su ministerio sacerdotal y su caridad pastoral, a la vez que les reconoce la dignidad de hijos de Dios y promueve la función propia de los laicos en la Iglesia” (Directorio para la vida y misión de los presbíteros, n. 30).
También hizo referencia a la conocida definición de parroquia que brinda el Documento de Puebla, esto es, «comunidad de comunidades» y dijo que en la parroquia, «casa y escuela de comunión» han de darse las notas de la vida cristiana con las que San Pablo exhorta a la iglesia de los Filipenses (la segunda lectura del día), esto es, el amor, un solo corazón, un solo pensamiento (aclaró, sin embargo, que no se trata de «uniformización» alguna, sino de la victoria sobre las letales divisiones y escisiones).
Refiriéndose a la convivencia y trabajo apostólico en común de las distintas asociaciones, instituciones y movimientos dentro de la parroquia, citó una vez más el Directorio, que alude, en esto, directamente a un deber del párroco: “Más concretamente, el párroco, siempre en la búsqueda del bien común de la Iglesia, favorecerá las asociaciones de fieles y los movimientos, que se propongan finalidades religiosas, acogiéndolas a todas, y ayudándolas a encontrar la unidad entre sí, en la oración y en la acción apostólica”.
Mons. Sarlinga exhortó al cura párroco a promover la evangelización y la misión, la caridad social, la buena armonía entre los distintos miembros de la comunidad, respetando sus legítimos carismas y aptitudes, el trabajo apostólico con los jóvenes, el cuidado de los enfermos, el espíritu de la Liturgia conforme a las normas de la Iglesia, la mancomunidad de valores trascendentes y la presencia evangelizadora en los medios de comunicación social. Recordó especialmente el Obispo el deber del párroco de ser ministro de la reconciliación y promover que en la iglesia catedral siempre haya confesores, también con las celebraciones penitenciales en los tiempos fuertes del Año Litúrgico, como son el Adviento y la Cuaresma.
Conociendo las cualidades del Padre Hugo, el Obispo pidió a los fieles que lo quieran y se dejen querer pastoralmente por él, para que en la paz de Cristo pueda ejercitar su misión espiritual con amabilidad y firmeza, con humildad y espíritu de servicio, privilegiando a los que sufren y a quienes padecen la pobreza, tanto material como espiritual.
Por último, le pidió al párroco que alimente a los fieles con la Palabra de Dios, con la predicación como «don de la verdad y del amor», a imagen del Buen Pastor, que no vive reprochando sino que carga a la oveja perdida sobre sus hombros y hace fiesta por su retorno al redil (cf. Lc 15,4-7).
Mons. Oscar Sarlinga hizo alusión en su homilía a la necesaria y vital comunión con la Iglesia, y citó al Directorio para la vida y misión de los presbíteros, de la Santa Sede, en lo referente a la comunión traducida en amor efectivo por el pueblo cristiano que se le encomienda al párroco: “Hombre de comunión, el sacerdote no podrá expresar su amor al Señor y a la Iglesia sin traducirlo en un amor efectivo e incondicionado por el Pueblo cristiano, objeto de sus desvelos pastorales. Como Cristo, debe hacerse "como una transparencia suya en medio del rebaño" que le ha sido confiado poniéndose en relación positiva y de promoción con respecto a los fieles laicos. Ha de poner al servicio de los laicos todo su ministerio sacerdotal y su caridad pastoral, a la vez que les reconoce la dignidad de hijos de Dios y promueve la función propia de los laicos en la Iglesia” (Directorio para la vida y misión de los presbíteros, n. 30).
También hizo referencia a la conocida definición de parroquia que brinda el Documento de Puebla, esto es, «comunidad de comunidades» y dijo que en la parroquia, «casa y escuela de comunión» han de darse las notas de la vida cristiana con las que San Pablo exhorta a la iglesia de los Filipenses (la segunda lectura del día), esto es, el amor, un solo corazón, un solo pensamiento (aclaró, sin embargo, que no se trata de «uniformización» alguna, sino de la victoria sobre las letales divisiones y escisiones).
Refiriéndose a la convivencia y trabajo apostólico en común de las distintas asociaciones, instituciones y movimientos dentro de la parroquia, citó una vez más el Directorio, que alude, en esto, directamente a un deber del párroco: “Más concretamente, el párroco, siempre en la búsqueda del bien común de la Iglesia, favorecerá las asociaciones de fieles y los movimientos, que se propongan finalidades religiosas, acogiéndolas a todas, y ayudándolas a encontrar la unidad entre sí, en la oración y en la acción apostólica”.
Mons. Sarlinga exhortó al cura párroco a promover la evangelización y la misión, la caridad social, la buena armonía entre los distintos miembros de la comunidad, respetando sus legítimos carismas y aptitudes, el trabajo apostólico con los jóvenes, el cuidado de los enfermos, el espíritu de la Liturgia conforme a las normas de la Iglesia, la mancomunidad de valores trascendentes y la presencia evangelizadora en los medios de comunicación social. Recordó especialmente el Obispo el deber del párroco de ser ministro de la reconciliación y promover que en la iglesia catedral siempre haya confesores, también con las celebraciones penitenciales en los tiempos fuertes del Año Litúrgico, como son el Adviento y la Cuaresma.
Conociendo las cualidades del Padre Hugo, el Obispo pidió a los fieles que lo quieran y se dejen querer pastoralmente por él, para que en la paz de Cristo pueda ejercitar su misión espiritual con amabilidad y firmeza, con humildad y espíritu de servicio, privilegiando a los que sufren y a quienes padecen la pobreza, tanto material como espiritual.
Por último, le pidió al párroco que alimente a los fieles con la Palabra de Dios, con la predicación como «don de la verdad y del amor», a imagen del Buen Pastor, que no vive reprochando sino que carga a la oveja perdida sobre sus hombros y hace fiesta por su retorno al redil (cf. Lc 15,4-7).
«MOTHER’S FEAST», LA FESTIVIDAD DE LA MADRE TERESA, EN ZÁRATE
En Zárate, la primera sede argentina de la congregación, se celebró «la fiesta de la Madre», o «Mother’s feast», como llaman en la lengua franca utilizada por la congregación, el inglés, en la ciudad donde está la casa de formación de las aspirantes (son 11), junto con un hogar de ancianos que fueron abandonados por los familiares en hospitales o recogidos de las calles (ahora son 65), y otro de niñas con riesgo social derivadas de distintos juzgados de menores (en este momento son 25). Allí estuvo la Madre Teresa en 1982, cuando visitó el país. Murió la Madre Teresa, un símbolo del amor y la caridad cristiana . En la Argentina viven 69 religiosas y 11 novicias y aspirantes. En el mundo hay 737 casas con 4713 religiosas que ya hicieron los votos perpetuos (de castidad, obediencia, pobreza y servicio voluntario y gratuito a los pobres más pobres) y 717 novicias y aspirantes. Provienen de 89 países, aunque la mayoría de las nuevas vocaciones son africanas y en cada destino realizan diferentes tareas según las necesidades del lugar. En todos, sin embargo, dedican por igual más de tres horas diarias a la oración.
Mons. Oscar Sarlinga, Obispo de Zárate-Campana, acompañado de Mons. Ariel Pérez (cura párroco), del diácono Mario y de seminaristas, celebró la festividad de la Beata Teresa de Calcuta en la misma capilla cuyo lugar eligió la Madre Teresa cuando vino a fundar la primera casa, en un templo hoy atiborrado de hermanas, ancianos, niñas y fieles laicos (entre ellos muchos jóvenes). Se encontraba presente la Madre Provincial. Explicó lo que significa hoy «tengo sed» en la perspectiva de la mística de la Madre Teresa, con un sentido de anuncio del Evangelio y de testimonio de la caridad, «hasta que duela» para con los más pobres y dolientes.
La Madre Teresa recibió la noticia sobre el Premio Nobel de la Paz, en l979, con una oración y una sonrisa. Cortó su pan y cumplió con su viejo hábito, al repartirlo en las misérrimas calles de Calcuta, una de las ciudades más pobres del mundo. Con la misma beatitud y la misma humildad, tres meses antes había pasado casi silenciosamente por la Argentina. Sin alboroto y en puntas de pie, también repartió altas porciones de paz y de amor y algún pan. En el Villango, en La Carbonilla y en Villa Ciriaco, que por entonces eran suburbios de la ciudad de Zárate donde la gente sufría necesidades, la frágil y etérea monja se mezcló con cuatro misioneras de la congregación fundada por ella, allí asentadas desde l978. La Hermana Teresa lavó ropa, anudó pañales y sonó pequeñas narices. Desde entonces, sus preferidos, los más pobres de los pobres, sustentan el honor de ser los argentinos que mejor la conocieron. A ellos se suman algunas familias y matrimonios que ayudaron a la Madre y a las hermanas en su fundación, y que hoy estaban presentes.
A esta altura, pocos conocen la porción de la historia de Agnes Bojaxhui, nacida en l909 en una aldea de Albania y transportada en su infancia a la entoncesYugoslavia. Hija de artesanos, desde los l2 años eligió el convento, respondiendo a un inequívoco llamado de Dios. En l928 fue enviada a los Himalayas para iniciar su noviciado y en l93l trabajó como maestra en Calcuta. Años después, la frágil hermana de caridad encontraría la porción final de su destino: portaba ya ese rostro mediterráneo poblado de arrugas que acentuaron su aire ascético. En l946 comenzó a atender a los leprosos, que son más de cuatro millones en la India, al tiempo que comenzaba a ser Teresa de Calcuta. Los enfermos, los pobres, los moribundos y los solitarios la llamaban Santa del Arroyo o Apóstol del Amor. Desde un miserable local abandonado, donde fundó Nirmal Hriday (Corazón Puro), cuyas puertas permanecieron abiertas día y noche, Teresa edificó su imperio de caridad y esperanza. No parece una simple coincidencia que ese local esté ubicado adyacente a Kalighat, el templo de la diosa Kali, diosa india de la fe. Impulsada por la necesidad de los desvalidos, en l950 funda la orden de las «Misioneras de la Caridad», que actualmente tiene l.400 miembros diseminados por 87 países. Su motor fue la fe, desplegada en la caridad sin límites. Hay que dar, decía, pero dar hasta que duela. Calcuta fue su ámbito puesto que Calcuta duele. Reino de las vacas sagradas y la inanición, en las décadas del 50 y del 60 era poblada por siete millones de habitantes. Cuatro de cada diez, morían antes de cumplir el año de vida, siete de cada diez jamás pisaron una escuela. Por las sucias calles de la ciudad, la Madre Teresa caminó diariamente, hasta hace muy poco, cuidando leprosos, hambrientos y niños agonizantes.
En la capilla de las Misioneras de la Caridad hay una sola y muda inscripción: «Tengo sed», una de las últimas palabras de Cristo en la Cruz. Claro, sed de agua, sed de fe, sed de amor, un clamor compartido y desesperado de los famélicos y de los leprosos, de los ancianos y de los niños atacados por el raquitismo, por prostitutas y mendigos, que constituyen el universo de ese oasis de la última esperanza. Cuando la Academia de Suecia decidió otorgarle el Nobel, acaso por única vez no se levantó ninguna voz en contra. Los 192.000 dólares y las 360.000 coronas donadas por el pueblo noruego siguieron el derrotero de todos los premios y donativos y transformados en insumos para los necesitados .La Madre Teresa se permitió tomar para ella 300 rupias, lo necesario para cambiar su andrajoso hábito y su desgastado calzado.
La pobreza y la miseria no son habitantes exclusivos de Calcuta. Durante 30 años, esa mujer escuálida y debilitada fundó más de cien hogares en distintos agujeros del mundo. Su discurso fue siempre el mismo: Esto es un regalo para los pobres, pero también es un regalo para los ricos que ahora tendrán oportunidad de sostenerlo. Victimizada por el paludismo y por severas deficiencias pulmonares y cardíacas, Teresa de Calcuta padeció diez internaciones en los úlimos años. Sólo esa llama interior la mantuvo viva y en acción. «Los pobres no necesitan de nuestra simpatía o de nuestra lástima. Necesitan de nuestra compañía y de nuestro amor, es decir, de la verdadera caridad», definió en lo que sería su último mensaje de amor, un testamento dictado con firmeza y convicción.
Calcuta también se encuentra en la Argentina. Como en las calles de esa ciudad india, se pueden ver en Zárate, la primera fundación, y también en Becar y en Benavídez y otros cuatro puntos del país religiosas con hábitos blancos con bordes azules.
Son las hermanas Misioneras de la Caridad, la congregación dedicada a la atención de "los más pobres de los pobres" fundada por la Madre Teresa de Calcuta, de cuya muerte se cumplirán diez años pasado mañana.
Si bien hablan perfectamente el castellano, entre ellas se entienden en inglés -el idioma oficial de la congregación- y rotan de países cada seis meses como mínimo y cinco años como máximo.
"Santa ya"
En la misa de pasado mañana, la principal intención será la canonización de la Madre Teresa.
Cuando, a los 87 años, la pequeña religiosa de origen albanés falleció, en 1997, los católicos clamaban a la Iglesia que fuera declarada "santa ya".
Menos de dos años después Juan Pablo II autorizó la apertura de esa causa -un caso excepcional, dado que aún no habían transcurrido cinco años de su muerte-, y en 2003 aprobó un milagro, la curación de una india de un tumor de abdomen, y la proclamó beata.
En ese proceso se conocieron escritos en los que la religiosa describió haber dudado de su fe durante años. Ayer, Benedicto XVI explicó en Loreto que también la Madre Teresa había conocido "el silencio de Dios".
Mons. Oscar Sarlinga, Obispo de Zárate-Campana, acompañado de Mons. Ariel Pérez (cura párroco), del diácono Mario y de seminaristas, celebró la festividad de la Beata Teresa de Calcuta en la misma capilla cuyo lugar eligió la Madre Teresa cuando vino a fundar la primera casa, en un templo hoy atiborrado de hermanas, ancianos, niñas y fieles laicos (entre ellos muchos jóvenes). Se encontraba presente la Madre Provincial. Explicó lo que significa hoy «tengo sed» en la perspectiva de la mística de la Madre Teresa, con un sentido de anuncio del Evangelio y de testimonio de la caridad, «hasta que duela» para con los más pobres y dolientes.
La Madre Teresa recibió la noticia sobre el Premio Nobel de la Paz, en l979, con una oración y una sonrisa. Cortó su pan y cumplió con su viejo hábito, al repartirlo en las misérrimas calles de Calcuta, una de las ciudades más pobres del mundo. Con la misma beatitud y la misma humildad, tres meses antes había pasado casi silenciosamente por la Argentina. Sin alboroto y en puntas de pie, también repartió altas porciones de paz y de amor y algún pan. En el Villango, en La Carbonilla y en Villa Ciriaco, que por entonces eran suburbios de la ciudad de Zárate donde la gente sufría necesidades, la frágil y etérea monja se mezcló con cuatro misioneras de la congregación fundada por ella, allí asentadas desde l978. La Hermana Teresa lavó ropa, anudó pañales y sonó pequeñas narices. Desde entonces, sus preferidos, los más pobres de los pobres, sustentan el honor de ser los argentinos que mejor la conocieron. A ellos se suman algunas familias y matrimonios que ayudaron a la Madre y a las hermanas en su fundación, y que hoy estaban presentes.
A esta altura, pocos conocen la porción de la historia de Agnes Bojaxhui, nacida en l909 en una aldea de Albania y transportada en su infancia a la entoncesYugoslavia. Hija de artesanos, desde los l2 años eligió el convento, respondiendo a un inequívoco llamado de Dios. En l928 fue enviada a los Himalayas para iniciar su noviciado y en l93l trabajó como maestra en Calcuta. Años después, la frágil hermana de caridad encontraría la porción final de su destino: portaba ya ese rostro mediterráneo poblado de arrugas que acentuaron su aire ascético. En l946 comenzó a atender a los leprosos, que son más de cuatro millones en la India, al tiempo que comenzaba a ser Teresa de Calcuta. Los enfermos, los pobres, los moribundos y los solitarios la llamaban Santa del Arroyo o Apóstol del Amor. Desde un miserable local abandonado, donde fundó Nirmal Hriday (Corazón Puro), cuyas puertas permanecieron abiertas día y noche, Teresa edificó su imperio de caridad y esperanza. No parece una simple coincidencia que ese local esté ubicado adyacente a Kalighat, el templo de la diosa Kali, diosa india de la fe. Impulsada por la necesidad de los desvalidos, en l950 funda la orden de las «Misioneras de la Caridad», que actualmente tiene l.400 miembros diseminados por 87 países. Su motor fue la fe, desplegada en la caridad sin límites. Hay que dar, decía, pero dar hasta que duela. Calcuta fue su ámbito puesto que Calcuta duele. Reino de las vacas sagradas y la inanición, en las décadas del 50 y del 60 era poblada por siete millones de habitantes. Cuatro de cada diez, morían antes de cumplir el año de vida, siete de cada diez jamás pisaron una escuela. Por las sucias calles de la ciudad, la Madre Teresa caminó diariamente, hasta hace muy poco, cuidando leprosos, hambrientos y niños agonizantes.
En la capilla de las Misioneras de la Caridad hay una sola y muda inscripción: «Tengo sed», una de las últimas palabras de Cristo en la Cruz. Claro, sed de agua, sed de fe, sed de amor, un clamor compartido y desesperado de los famélicos y de los leprosos, de los ancianos y de los niños atacados por el raquitismo, por prostitutas y mendigos, que constituyen el universo de ese oasis de la última esperanza. Cuando la Academia de Suecia decidió otorgarle el Nobel, acaso por única vez no se levantó ninguna voz en contra. Los 192.000 dólares y las 360.000 coronas donadas por el pueblo noruego siguieron el derrotero de todos los premios y donativos y transformados en insumos para los necesitados .La Madre Teresa se permitió tomar para ella 300 rupias, lo necesario para cambiar su andrajoso hábito y su desgastado calzado.
La pobreza y la miseria no son habitantes exclusivos de Calcuta. Durante 30 años, esa mujer escuálida y debilitada fundó más de cien hogares en distintos agujeros del mundo. Su discurso fue siempre el mismo: Esto es un regalo para los pobres, pero también es un regalo para los ricos que ahora tendrán oportunidad de sostenerlo. Victimizada por el paludismo y por severas deficiencias pulmonares y cardíacas, Teresa de Calcuta padeció diez internaciones en los úlimos años. Sólo esa llama interior la mantuvo viva y en acción. «Los pobres no necesitan de nuestra simpatía o de nuestra lástima. Necesitan de nuestra compañía y de nuestro amor, es decir, de la verdadera caridad», definió en lo que sería su último mensaje de amor, un testamento dictado con firmeza y convicción.
Calcuta también se encuentra en la Argentina. Como en las calles de esa ciudad india, se pueden ver en Zárate, la primera fundación, y también en Becar y en Benavídez y otros cuatro puntos del país religiosas con hábitos blancos con bordes azules.
Son las hermanas Misioneras de la Caridad, la congregación dedicada a la atención de "los más pobres de los pobres" fundada por la Madre Teresa de Calcuta, de cuya muerte se cumplirán diez años pasado mañana.
Si bien hablan perfectamente el castellano, entre ellas se entienden en inglés -el idioma oficial de la congregación- y rotan de países cada seis meses como mínimo y cinco años como máximo.
"Santa ya"
En la misa de pasado mañana, la principal intención será la canonización de la Madre Teresa.
Cuando, a los 87 años, la pequeña religiosa de origen albanés falleció, en 1997, los católicos clamaban a la Iglesia que fuera declarada "santa ya".
Menos de dos años después Juan Pablo II autorizó la apertura de esa causa -un caso excepcional, dado que aún no habían transcurrido cinco años de su muerte-, y en 2003 aprobó un milagro, la curación de una india de un tumor de abdomen, y la proclamó beata.
En ese proceso se conocieron escritos en los que la religiosa describió haber dudado de su fe durante años. Ayer, Benedicto XVI explicó en Loreto que también la Madre Teresa había conocido "el silencio de Dios".
NUEVA COMUNIDAD RELIGIOSA
VIERNES 15 DE AGOSTO, EN LA SOLEMNIDAD DE LA ASUNCIÓN DE LA SSMA. VIRGEN A LOS CIELOS SE ESTABLECIERON LAS HNAS. DE MIYASAKI
Con una misa inaugural, que presidiÓ, monseñor Oscar, quedaron establecida en la localidad de Matheu, partido bonaerense de Escobar, la congregación de las Hermanas de la Caridad de Miyazaki.
Estuvieron presentes en la celebración la Madre Superiora General proveniente expresamente del Japón, de donde es la congregación; las madres provinciales de Bolivia, Perú y Brasil, países de Iberoamérica en donde ya están establecidas las hermanas; y los superiores salesianos, ya que un sacerdote salesiano fue el fundador de la congregación en el Japón y otro sacerdote salesiano es autor de la iniciativa para que estas hermanas se establezcan en este lugar de la Argentina.
También en la Santa Misa estuvieron, Mons. Edgardo Gallupo, Rvdo. P. Tomás Llorente Martínez, el Pbro. Luis Grassi y el Pbro. Mauricio Aracena
Con una misa inaugural, que presidiÓ, monseñor Oscar, quedaron establecida en la localidad de Matheu, partido bonaerense de Escobar, la congregación de las Hermanas de la Caridad de Miyazaki.
Estuvieron presentes en la celebración la Madre Superiora General proveniente expresamente del Japón, de donde es la congregación; las madres provinciales de Bolivia, Perú y Brasil, países de Iberoamérica en donde ya están establecidas las hermanas; y los superiores salesianos, ya que un sacerdote salesiano fue el fundador de la congregación en el Japón y otro sacerdote salesiano es autor de la iniciativa para que estas hermanas se establezcan en este lugar de la Argentina.
También en la Santa Misa estuvieron, Mons. Edgardo Gallupo, Rvdo. P. Tomás Llorente Martínez, el Pbro. Luis Grassi y el Pbro. Mauricio Aracena
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