Friday, December 28, 2012

Celebraciones de Nochebuena en las unidades penitenciarias de Campana y Baradero


 El jueves 20 y el viernes 21 de diciembre se celebró la misa de nochebuena en las unidades penitenciarias N° 21 en Campana y en la N°11 de Baradero. Los internos de ésta última realizaron un pesebre viviente culminando con un ágape fraterno en el que se les hizo llegar las donaciones de los laicos de las ciudades de Campana y Baradero. El Pbro. Pablo Iriarte, quien presidió ambas celebraciones, retomando las palabras del Evangelio recordó a los internos y a la catequesis toda la necesidad de renovar nuestra vida cristiana, testimoniando nuestra fe en el amor a Dios y al prójimo.
Este mensaje se hizo vivo a través del pedido que los propios presos le hicieron al Pbro. Pablo de bendecir las celdas en la unidad de Campana. Allí se vio marcada la importancia de la fe y el amor a Dios, mas allá de la privación de la libertad.
A través de la presente nota el P. Pablo agradece públicamente la desinteresada colaboración de todos los laicos que a través de sus oraciones y de sus colaboraciones llegan a Cristo presente en los internos.

Palabras del Nuncio apostólico en el encuentro de capellanes de la provincia de Buenos Aires el 10 de diciembre
Citando a San Mateo: "Estuve preso y visitaste” (Mt. 25, 36), podemos decir que Cristo se identifica con el preso, desea encontrarse con el detenido que también es la cara de Cristo. La tarea pastoral con los encarcelados no es fácil y tenemos en cuenta lo que nos recuerda San Pablo "Donde abundó el pecado, sobreabundó la gracia" (Rm. 5, 20). Esta pastoral es escuela de misericordia, escuela de aprender y ver en el rostro del otro a Dios. Recordemos que Cristo estuvo preso, pero la justicia humana es distinta de la justicia divina. Es tratar de que el detenido sea escuchado por el catequista y trabajar a favor del bien espiritual del detenido. Cristo cura las heridas del pecado y de la angustia y lo hace a través de esta pastoral. El tiempo dedicado a la pastoral carcelaria es un tiempo de gracia, un tiempo de renovación.

El Nuncio desarrolló dos ideas principales:
La necesidad de cambiar la mentalidad de los menores para que no imiten la delincuencia de sus mayores y evitar que los jóvenes cometan hechos que los haga entrar a la prisión. Se debe alejarlos de los lugares donde se multiplica la malicia y buscar otros modos de asistir y mejorar la situación de las personas mas humildes desde la educación. La educación humana en el respeto del otro, la educación moral y la educación religiosa deben ser los motores para evitar la multiplicación del mal, trabajando por la renovación en la persona de cada preso.

Thursday, December 27, 2012

Inauguración del retablo lateral “del Año de la Fe” en la iglesia concatedral de Belén de Escobar y entronización de la imagen del Apóstol San Pedro

Se trata de la inauguración del retablo lateral “del Año de la Fe” en la iglesia concatedral de Belén de Escobar y entronización de la imagen del Apóstol San Pedro


El Obispo Mons. Oscar Sarlinga llamó a a recuperar el sentido del “anuncio natalicio”, en sentido de las nuevas creaturas que somos por la gracia y asimismo “el profetismo de la esperanza”, sin la cual la Iglesia y la sociedad quedarían inermes 


Siguiendo un pedido del Obispo Mons. Oscar Sarlinga, la feligresía de la iglesia concatedral de la Natividad del Señor en Escobar (diócesis de Zárate-Campana) ofrendó un hermoso y artístico retablo (o “altar lateral”), obra de un reconocido artista en madera de cedro, donde el mismo Obispo entronizó el sábado 22 de diciembre la venerable e insigne imagen de San Pedro, del siglo XVIII, la misma que acompañó la eucaristía de apertura diocesana del Año de la Fe, el 12 de octubre en Nuestra Señora del Pilar, ante millares de fieles. Junto a la sagrada imagen fueron puestos en valor unos relicarios que desde muy antiguo estaban destinados a la iglesia de la Natividad, con las reliquias autenticadas del Padre apostólico (y obispo) San Timoteo, y de otros santos. Mons. Oscar Sarlinga procedió a la bendición del nuevo retablo y de la imagen del Apóstol, después del saludo inicial, luego de lo cual se dio la procesión hacia el altar mayor, y siguió con la oración colecta. En la homilía el Obispo hizo referencia a la fe, la fe en el aspecto subjectual de “adhesión de toda la inteligencia y de todo el corazón”, y también en su dimensión de “contenido de la fe que la Iglesia nos propone para creer”, y que hemos de profundizar, principalmente con el Concilio Vaticano II y con el Catecismo de la Iglesia Católica” –dijo-. Refiriéndose al Concilio, dijo que el día de su apertura, el 11 de octubre de 1962 se celebraba la fiesta de María Santísima, Madre de Dios y que por eso el Papa Benedicto XVI, en su convocatoria al Año de la fe, se lo confió a la Virgen, y para ello peregrinó a Loreto, a la Santa Casa, pues la Virgen María brilla siempre como estrella en el camino de la nueva evangelización”. Exhortó también a recuperar el sentido del “anuncio natalicio”, en sentido de las nuevas creaturas que somos por la gracia y de cómo el Señor naciente nos hace “renacer en Él”, y asimismo “el profetismo de la esperanza”, al que ve, dijo Mons. Sarlinga, como un componente revitalizador para la nueva evangelización al que nos llama la Iglesia, y sin el cual, “tanto la misma Iglesia como la sociedad quedarían inermes”. La Santa Misa fue televisada en directo por el Canal Provincial y el Canal de Escobar.
La sagrada imagen del Apóstol San Pedro que fue entronizada es una de las pocas del mismo con que cuenta la diócesis, puesto que las hay, a excepción de la de Escobar, expuestas a la pública veneración sólo tres, en la ciudad de Campana, dos de la capilla de San Pedro en el barrio de Villanueva habiendo sido, la ubicada junto al altar, proveniente de la catedral de San Isidro (según documento de donación). La tercera imagen de San Pedro, junto con la de San Pablo, está en la actual parroquia de Nuestra Señora de Luján y de los Santos Apóstoles Pedro y Pablo, en Campana (luego de haber estado en el Seminario diocesano, cuando funcionó en la ciudad, hasta el año de su cierre, en 2001). Actualmente en el Seminario (en Campana) no hay estatuas sino dos imágenes pictóricas que representan a los Apóstoles.
También citó el Obispo algunos aspectos de la homilía del Papa Benedicto XVI para la apertura delAño de la fe en Roma, los cuales pueden encontrarse en:

Y en:

En especial se refirió al parágrafo en el que el Papa Benedicto afirma que el Año que ese día inauguraba “ (…) está vinculado coherentemente con todo el camino de la Iglesia en los últimos 50 años: desde el Concilio, mediante el magisterio del siervo de Dios Pablo VI, que convocó un «Año de la fe» en 1967, hasta el Gran Jubileo del 2000, con el que el beato Juan Pablo II propuso de nuevo a toda la humanidad a Jesucristo como único Salvador, ayer, hoy y siempre. Estos dos Pontífices, Pablo VI y Juan Pablo II, convergieron profunda y plenamente en poner a Cristo como centro del cosmos y de la historia, y en el anhelo apostólico de anunciarlo al mundo. Jesús es el centro de la fe cristiana”.
Y asimismo, reafirmó Mons. Sarlinga, aludiendo al Concilio Vaticano II, que el Papa mencionó en dicha homilía que (…) «el supremo interés del Concilio Ecuménico es que el sagrado depósito de la doctrina cristiana sea custodiado y enseñado de forma cada vez más eficaz… La tarea principal de este Concilio no es, por lo tanto, la discusión de este o aquel tema de la doctrina…Para eso no era necesario un Concilio... Es preciso que esta doctrina verdadera e inmutable, que ha de ser fielmente respetada, se profundice y presente según las exigencias de nuestro tiempo» (AAS 54 [1962], 790. 791-792). Así decía el Papa Juan en la inauguración del Concilio”.
De la Santa Misa presidida por Mons. Oscar Sarlinga concelebraron los Pbros. Mauricio Aracena, rector, Albino Cabral, cura párroco, Nestor Villa y Carlos Bertone, vicario parroquial. El coro de jóvenes de la parroquia engalanó la celebración, al término de la cual se tuvo un gesto, similar al reciente en la iglesia catedral de Santa Florentina, de la luz de la paz de Belén, de la pastoral scout de la comisión católica de la asociación civil Scouts de Argentina.

Thursday, December 06, 2012

Ecos del cincuentenario de la presencia de la comunidad portuguesa en Fátima, Pilar

La procesión con la imagen de la Virgen de Fátima
El domingo 2 de diciembre la comunidad portuguesa en Argentina celebró el cincuentenario de su visita y peregrinación a Fátima, en el partido de Pilar, en la casa de los Padres Siervos de María. El evento contó con la presencia de nuestro Obispo Mons. Oscar Sarlinga, quien asistió a la procesión y presidio la eucaristía.
Este domingo 2 de diciembre se cumplieron los 50 años de la presencia de la comunidad portuguesa, encuentro, visita y peregrinación, a la localidad de Fátima, en el partido de Pilar. Los Padres Siervos de María tienen allí una casa con hospedería, un muy vasto predio y la capilla, que alberga la sagrada imagen de la Virgen de Fátima, don del Papa Pío XII a la nación argentina, de manos del embajador de entonces, Dr. Ruiz Guiñazú, quien luego destinara esos campos que hoy se llaman Fátima a una comunidad religiosa, y la comisión de damas llamara, por entonces, a la orden de los mencionados Siervos de María, quienes allí se encuentran, estando presentes los Padres Marco y Anselmo.
Sigue la proesión con la imagen de la Virgen de Fátima
Una multitud de portugueses, hijos, nietos, y descendientes, que forman “la comunidad portuguesa” principalmente provenientes de la Provincia de Buenos Aires, y en lo que concierne a la diócesis de Zárate-Campana, en especial de Escobar, llegaron al encuentro, en el medio siglo de su realización.
En efecto, tanto los portugueses nativos como sus hijos, nietos y bisnietos de esa localidad se dieron cita, como hace 50 años, junto a la iglesia. Por especial concesión, dado que siempre es el domingo anterior a la festividad de la Inmaculada Concepción cuando se tiene el encuentro, se celebró la misa de la Virgen, con gran asistencia de fieles, luego de un día de encuentro de familias, amigos, y público en general.  Antes de la Misa, a las  20 hubo una procesión por las calles adyacentes al predio, con reflexiones y cánticos a la Virgen (en castellano y en portugués); a las 20.30 comenzó la misa, presidida por monseñor Oscar Sarlinga, obispo de Zárate-Campana, y concelebrada por el Pbro. Mauricio Aracena, por el R.P. Anselmo, de los Siervos de María, y asistida por los Diáconos permanentes Pedro Bruno y Sergio Pandiani, junto con la presencia del seminarista Elías Duff. La jurisdicción parroquial a la que pertenece la localidad de Fátima es San Luis Gonzaga, de Manzanares-Fátima. Como se ha dicho, en la capilla de Nuestra Señora de Fátima, de los Padres Siervos de María, se encuentra una imagen que fue la primera réplica que se hizo de la auténtica y original imagen venerada en la Capelinha de las apariciones, en Fátima (Portugal) y de mano del mismo autor. Dicha imagen fue donada al Papa Pío XII, el cual la tuvo consigo un tiempo y luego quiso que fuera enviada “a la Argentina”, donde un grupo de damas que había adquirido unas hectáreas en Pilar donó los terrenos para que se instalara esa congregación religiosa, y, una vez construida la capilla, allí se entronizó a la Virgen. En la homiía que el obispo pronunció en castellano y un poco en portugués, dijo que se encontraba muy contento de recibir en la diócesis a tan numerosas familias, a las cuales a lo largo de estos años los había visto incluso casarse, tener hijos, y que los reconocía ya, y al mismo tiempo les pedía que mantuvieran la piedad que ha caracterizado al pueblo portugués, y su cultura del trabajo, tratándose de gente tan buena proveniente de un país que dio tanto a la civilización universal, con sus descubrimientos y con sus fundaciones, y a la Iglesia del Señor, con la evangelización. Habló del misterio de la Inmaculada Concepción, que no se trata de una simple advocación, “sino del ser de la Virgen María” y luego hizo alusión a la advocación de Fátima, a su historia, y a lo esencial del mensaje, que podemos actualizar para el día de hoy, y que “condensa –dijo- lo esencial del mensaje del Evangelio”. Al terminar la misa, celebrada en un altar preparado en un gran palco, se realizó un espectáculo de fuegos artificiales y luego una procesión de antorchas partió desde allí hasta la capilla en la que se encuentra la imagen histórica de Nuestra Señora de Fátima. La llamada “Patria portuguesa” o colectividad potuguesa, habiendo agradecido a Mons. Oscar Sarlinga su presencia nuevamente para un acontecimiento como éste, que los congrega como familia lusitana, ha anunciado que el año próximo, el 2012, conmemorará con grandes festejos el quincuagésimo aniversario de la peregrinación y congregación lusitana a la localidad de Fátima, donde se encuentra, como se dijo, la imagen insigne que perteneció al Papa Pío XII.
Proclamación del Evangelio en Fátima
La comunidad que se acerca a recibir la Eucaristía
La inmigración portuguesa
La inmigración de portugueses al actual territorio argentino tuvo lugar primero durante la colonización española, sobre todo en Buenos Aires y su zona de influencia, y luego en la región de las Misiones Jesuíticas, especialmente durante el período de la unión dinástica de Castilla y Portugal.
Los portugueses radicados en Buenos Aires durante la colonia, casi en su totalidad varones, establecieron una red de relaciones comerciales y familiares de gran influencia en la vida económica de la capital del virreinato. Tras la restauración de la independencia de Portugal, prosiguió una cierta inmigración.
La comunidad portuguesa de la ciudad de Buenos Aires y su zona de influencia proviene de diversos grupos sociales, como peones y artesanos pertenecientes a las clases trabajadoras y también un grupo de clase media y media alta dedicado al comercio.
A fines del siglo XIX y durante la primera mitad del siglo XX siguieron arribando portugueses, entre los cuales no pocos caboverdianos, pueblo mixogénico con linajes africanos y portugueses en el que predominaron los rasgos culturales portugueses y que en tiempo de su inmigración a la Argentina poseían el pasaporte portugués, establecidos sobre todo en la zona sur del Gran Buenos Aires (partidos de Avellaneda, Lomas de Zamora, Quilmes, Berisso y Ensenada). También son numerosos en el partido de La Matanza, en las ciudades de Isidro Casanova y González Catán, que estuvieron presentes en el encuentro. En la diócesis de Zárate-Campana son muy numerosos los descendientes de portugueses en el partido de Belén de Escobar, y también, aunque en menor cantidad, en el mismo Pilar.+